Los últimos meses han sido de un intenso activismo, por la
defensa de nuestro partido movimiento en México, más en nuestro estado de Nuevo
León, inmerso en el conservadurismo clerical ultraderechista, que
lamentablemente tiene un gran poder de influencia, en los usos del poder
político y económico de los funcionarios de los gobiernos y partidos de nuestro
estado, muy alejados del interés de lograr los más altos niveles de desarrollo
social y humano de los habitantes, más alejados de que logremos integrar la
democracia y el pleno disfrute de las libertades y derechos que como ciudadanos
tenemos.
Resulta que después de haber desarrollado, conforme a la
convocatoria nacional emitida por nuestros órganos de dirección y conducción
del partido, para desarrollar las asambleas distritales, durante el pasado mes
de octubre, donde elegiríamos a los Consejeros Distritales, que a la vez se
convertirían en Congresistas Estatales y Nacionales, los cuales a su vez
elegirían a los integrantes de los Comités Ejecutivos Estatal y Nacional de
MORENA, la intromisión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación,
determinó que habían sido invalidas y que teníamos que reponer el proceso, lo
que no había hecho en ningún otro partido, en la historia reciente de nuestro
país.
Los resultados de las asambleas, habían sido contrarios a los
intereses de los pragmáticos, oportunistas, que habían logrado infiltrarse en
nuestro partido, en el marco de las alianzas políticas, que la dirigente en
funciones como presidenta Yeidckol Polevnski, hizo en el proceso electoral del
2018 y que se habían hecho para fortalecer el resultado victorioso que
obtuvimos en la presidencia y el Congreso de la Unión. Al convertirnos en el
partido en el poder, desplegaron y han seguido con sus ambiciones voraces y sin
escrúpulos para adueñarse y seguir usándonos en sus pragmatismos de su ser
político, sin ideales ni valores, a contentillo de las oligarquías del viejo
régimen político que estamos tratando de acabar en la Cuarta Transformación que
con AMLO encabezamos intentando mantener una revolución pacífica y sin
violencia de nuestra patria.
La señora en funciones de presidenta, Yeidckol, observó, como
amenazante, que la mayoría de los congresistas electos, en esas asambleas, eran
afines a la compañera Bertha Lujan, su otrora adversaria como candidata a ser
la próxima presidenta del Comité Ejecutivo Nacional de nuestro partido, sus
quejas han sido porque no se han aceptado como militantes los cientos de miles
de afiliados durante el proceso electoral, que elle dirigió y que en su gran
mayoría son priistas y ex panistas, que fueron integrados con los vicios del
clientelismo y el corporativismo político del viejo régimen. Alertado el
Consejo Nacional, había decidido que sólo serían considerados afiliados los que
se integraron hasta el mes de noviembre del 2017, es decir la mayoría de los
verdaderos militantes fundadores y de base de MORENA.
Ante esta crisis política que ha generado la intromisión de
los poderes facticos que siguen teniendo sus influencias en el TEPJF y en el
uso de sus testaferros oportunistas para apropiarse del partido, mediante un
acuerdo político, celebrado por las dirigentes nacionales, Yeidckol Polevnski,
secretaria general y presidenta en funciones del Comité Ejecutivo Nacional y
Bertha Lujan, presidenta del Consejo Nacional, con la mediación de Héctor Díaz
Polanco, presidente de la CNHJ, se había convocado a un Congreso Nacional Extraordinario de MORENA para el próximo sábado 30 de
noviembre, donde luego nuevamente
Yeidckol, faltó a honrar su palabra, negándose a firmar la convocatoria y
entonces Bertha Lujan decidió convocar a una
Reunión Extraordinaria del Consejo Nacional, ampliando la invitación a la
militancia de base para esa misma fecha
Fue tanto el repudio a Yeidckol, por sus reiteradas posturas
a no conducirse con honestidad, faltar a la verdad y a los principios
fundamentales de nuestro movimiento-partido, que decidimos presentar los compañeros
fundadores y consejeros estatales de MORENA en Nuevo León: Rogelio González,
Ismael Robledo y yo, una Denuncia Queja ante la Comisión Nacional de Honestidad
y Justicia, donde damos cuenta de sus reiteradas transgresiones a nuestro
estatuto y los principios y solicitamos no sólo que la retiren de su cargo,
sino además que sea expulsada de nuestro partido, por las graves transgresiones
recurrentes.
El Hecho es que no quedan más de dos caminos para nuestro
movimiento-partido: Uno, es lograr el rescate de nuestra institucionalidad,
donde prevalezca el respeto incondicional a nuestro Estatuto, los Principios y nuestro Programa Político, para lograr ser
el partido real de la esperanza de nuestro pueblo e imponer toda nuestra fuerza
en las acciones políticas de apoyo a nuestro presidente Andrés Manuel López
Obrador y lograr los objetivos de la 4T y Dos, seguir con el pragmatismo
ramplón oportunista que encabeza Yeidckol y sus seguidores sabandijas
siniestros inmersos en las formas corruptas del quehacer político del régimen
de oprobio que pretendemos acabar.
