Con el acecho de dos huracanes,
uno que viene del océano pacifico y otro del océano atlántico, que amenazan con
tormentas riesgosas para amplias zonas territoriales, donde vivimos más del 50%
de la población en México, que sumarian mas desgracias para nuestro pueblo,
sobre todo a las familias en pobreza o en vulnerabilidad, que según las cifras
oficiales de los mismos organismos que nos gobiernan ya suma el 80% de los
mexicanos, estamos celebrando el 203 aniversario del inicio de esta gesta
heroica que no ha concluido sus objetivos de que nuestra patria logre
cabalmente su independencia y libertad como nación, menos acabar con la
explotación y las modernas formas de esclavitud que las oligarquías
internacionales y nacionales han instrumentado como estrategias de dominación
sobre los ciudadanos.
Estas tormentas han logrado
suspender los actos oficiales celebratorios, con sus parafernalias de sus festejos
patrios, simuladoras de los logros de esta gesta heroica, en algunos municipios
de nuestra nación, lo que históricamente,
en las últimas décadas no hemos logrado los movimientos oposicionistas al
régimen ignominioso de los gobiernos pripanistas, generadores de la precariedad
económica, política, social y cultural prevaleciente en la gran mayoría de
nuestros habitantes. Para lograr el acto conmemorativo central, de este día,
que los presidentes en turno encabezan en el Zócalo de la ciudad de México, el
régimen actual tuvo que recurrir al desalojo violento, reprimiendo con las
fuerzas policiacas, a los maestros de la Coordinadora Nacional de los
Trabajadores de la Educación (CNTE), quienes en este momento enaltecen, esas
banderas enarboladas por los luchadores de nuestra independencia, al enfrentar
con dignidad sus demandas de justicia ante las imposiciones de la denominada
reforma educativa, que atentan contra sus derechos laborales y mas atentan al
desarrollo de su misión educativa, al contribuir su pretendida reforma, con los rezagos que en materia
educativa hemos tenido por décadas, constituyéndose en uno de los factores más
importantes que han obstaculizado el desarrollo humano y social de nuestra
nación en congruencia con las grandes riquezas que tenemos como país.
La lucha del CNTE es una más, que
se suma a los movimientos de oposición al régimen, encabezado por el presidente
Enrique Peña Nieto, y sus padrinos mafiosos del pripanismo, quienes embriagados
del poder económico y político que ostentan, están intentando hacer sus denominadas reformas estructurales que en este año quieren
culminar con el robo más grande en la historia moderna de México: Las reformas
privatizadoras de PEMEX y de la industria energética que por décadas han sido
administradas por el estado. Para lograr su objetivo, utilizan nuevamente a sus
aliados de los medios de comunicación que con sus, periodistas, publicistas,
editorialistas y conductores recurren a estar sembrando y cultivando sus
mentiras para lograr inhibir resistencias y rebeldías, tratando de fortalecer
el conformismo y la pasividad de la población, que les permita seguir usufructuando
el poder autoritario y explotador que les distingue.
Han sido estos regímenes de los pripanistas,
que desde el siglo pasado han enarbolado sus propuestas reformistas, que han
obstaculizado los necesarios cambios revolucionarios que ha requerido nuestra
sociedad para alcanzar esos grande anhelos libertarios e independentistas que
nuestros héroes nacionales de la independencia, encabezados por Miguel Hidalgo,
Ignacio Allende, Juan Aldama, Mariano Abasolo, José María Morelos y Josefa
Ortiz, nos legaron para que nuestra nación trascienda y lograra, además de su
independencia y acabar con los abusos en la explotación de nuestros recursos naturales, superar
la esclavitud, la lacerante marginación y pobreza, que en aquellos tiempos, prevalecía
mas entre los indígenas y mestizos novohispanos, con su exclusión de la
enseñanza, sin libertades democráticas, ni de comercio, con un sistema de
castas que profundizaba las diferencias de clase social. Fueron necesarios cien
años más para que se intentara una lucha revolucionaria, que lamentablemente
fue truncada por ese reformismo, que los gobiernos pripanistas han
magistralmente utilizado como estrategia de dominación y manipulación de las
masas, con sus engendros de oligarcas partidistas y empresariales, prestos a
utilizar en sus peroratas revolucionarias las necesarias reformas, en sus tiranías
de gobiernos sexenales una y otra vez son sus insignes reformas desde las políticas, adminsitrativas, económicas,
hacendarias, fiscales, educativas, las de las comunicaciones, laborales, las de
seguridad social, salud, energéticas, entre las más referidas, como su panacea
para ahora sí lograr los más altos niveles de crecimiento económico y social de nuestra nación, en el
cual cada sexenio han fracasado, con una gran impunidad de los gobernantes y
funcionarios responsables.
Con el neoliberalismo del
capitalismo recargado, desde hace más de cuarenta años, han insistido en sus
necesarias reformas estructurales, que sólo han sido dirigidas a desmantelar y
minimizar las funciones más elementales del estado moderno, para proteger a sus habitantes garantizándoles el derecho universal
a la salud, la seguridad social, la alimentación, el trabajo y la vivienda
digna, la educación, la seguridad, con libertades democráticas y el respeto
incondicional a los derechos civiles y humanos de sus habitantes.
Son sus llamadas reformas
estructurales, con que una y otra vez nos mienten, diciendo que son necesarias para
solucionar los graves problemas económicos y del bienestar humano que hemos
venido padeciendo crecientemente desde entonces. En este gobierno ya se reformo
la ley laboral, que para lo único que les ha servido fue para incrementar las condiciones
de explotación para los trabajadores, menoscabando sus prestaciones laborales,
dijeron que esa reforma lograría mas empleos, estos se han incrementado, según sus
propias cifras; antes habían reformado
al IMSS. Luego al ISSSTE y los servicios que prestan siguen siendo muy
precarios, con graves problemas económicos para garantizar cuando menos atención
de calidad a sus derechohabientes, sus reformas fiscales, una y otra vez, han
dicho que son para el crecimiento económico, que año tras año no logra el
esperado crecimiento económico de más del 4% del PIB anual sostenido, para que realmente impacte en el
crecimiento de las economías familiares, hoy quieren privatizar PEMEX y nos vuelven a
mentir con estupideces, como que con esto
bajaran los costos del gas, las gasolinas y los recibos de luz que
pagamos.
En este día de la independencia
mantengamos la lucha contra este reformismo que ha lesionado gravemente a
nuestra nación, evitemos que estos oligarcas logren el robo más grande contra
nuestra patria, el petróleo debe seguir siendo de nuestra nación en beneficio de todos los
mexicanos.
Digamos no a su reforma de PEMEX y del manejo de los energéticos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario