El próximo domingo 4 de octubre, se inicia el proceso de
renovación de los dirigentes en los diferentes niveles de nuestra organización
partidista MORENA, ese día se elegirán en todo el país los consejeros distritales, 10
por cada uno, de los 300 distritos electorales federales, que existen en
nuestro país, quienes posteriormente serán responsables, en cada una de los
congresos de los Estados y del D.F., de
elegir los presidentes de los Consejos Estatales y los encargados de los Comités
Ejecutivos Estatales.
En Nuevo León, elegiremos, ese día 10 consejeros por cada uno
de los 12 distritos electorales federales, que tenemos en el estado, y el
siguiente domingo 11 de octubre será el Congreso Estatal que designará a los
encargados del Comité Ejecutivo Estatal, que conjuntamente con el Consejo Estatal,
dirigirán el trabajo político dirigido a fortalecer nuestra organización para
enfrentar la gran batalla del proceso electoral del 2018 y así lograr la victoria,
en las próximas elecciones del nuevo presidente y de los integrantes del Congreso de la Unión
en México, que nos llevara a acabar con el régimen de oprobio de los pripanistas
que hemos venido padeciendo.
Conforme al Estatuto y la convocatoria deberán ser procesos democráticos,
respetuosos de la libertad de expresión, de la diversidad de nuestros militantes,
donde no deben de existir las lacras de los partidos tradicionales subsumidos
en la subcultura política, donde se ausenta la Ética política, con sus conductas
nefastas del clientelismo, ofreciendo dadivas a los militantes para que
asistan, voten por tal o cual compañero, o del corporativismo, haciendo
acarreos grupales, transportándolos con el fin de que sus asistentes,
garanticen imposiciones en la elección de los dirigentes, para luego manejar a
modo conforme a sus intereses de grupo sus conductas políticas.
En MORENA las elecciones son mediante voto libre directo y
secreto, encargo por encargo, después de la presentación personal de cada uno
de los candidatos, en las asambleas. No permitimos planillas ni grupos facciosos,
organizados con el fin de que prevalezcan sus intereses a modo, como en los
estilos de las campañas políticas tradicionales de los partidos existentes en
México, con sus proselitismos inmersos en las mentiras, engaños, la simulación,
sin escrúpulos, en el influyentísimo, donde las relaciones, los recursos
financieros y las emociones son más determinantes en las decisiones de los
electores, más que el pensamiento crítico, analítico de las personas y perfiles
adecuados de los candidatos para el
desempeño de la función en el encargo al que aspira.
Hoy que ya somos partido político nacional, no estamos
exentos de padecer a personalidades que
desborden en sus ambiciones y voracidad por quedar en los “cargos”, fantaseando
los usos del poder político y económico en beneficio personal y de sus grupos, muy
puestos a reproducir las desviaciones y perversiones, que han acabado con los
partidos políticos, más de la izquierda, nutriendo la imagen negativa, que los regímenes
gobernantes impulsan de los políticos y los partidos, para además seguir
impulsando la “ciudadanización” y los candidatos independientes de los partidos,
que hoy impulsan como una de sus estrategias mas, para evitar nuestra victoria política
contundente con Andrés Manuel López Obrador en el 2018.
En estas elecciones necesitamos los mejores hombres y mujeres
afiliadas en nuestro partido MORENA, no sólo tienen que disponer el tiempo
completo para nuestra organización y contar con sus propios recursos
financieros, para auxiliar el desarrollo de sus desempeños, como lo establece
la convocatoria, sino además que tengan probidad, donde su persona este inmersa
en la honestidad, sean incorruptibles, leales a nuestros principios, ideología
y programa político, con una cultura democrática integrada que elimine toda
forma de autoritarismo, capaz de ambientar las relaciones fraternales y
solidarias de toda la militancia, mas en las asambleas y reuniones de trabajo
organizativo, con un conocimiento pleno de nuestro Estatuto y documentos básicos,
con capacidad para actuar en las funciones del encargo al que aspira,
desarrollando las tareas con responsabilidad y disciplina.
Hagamos de las elecciones internas de MORENA para la renovación
de sus dirigentes, una fiesta democrática, respetando cabalmente la
convocatoria y el Estatuto, enalteciendo,
con nuestra asistencia y haciendo difusión con los afiliados para que asistan, a la asamblea distrital que nos corresponde, elijamos
los mejores perfiles de compañeros y compañeras militantes, y mantengamos
nuestra férrea oposición al régimen pripanista antidemocrático, asesino y
corrupto de su presidente Peña Nieto, no duden que sus testaferros intentaran
dañarnos en estos eventos, siempre estarán al acecho para debilitar nuestra
organización.