viernes, 26 de febrero de 2016

EL PAPA FRANCISCO Y LOS USOS DEL PODER EN MEXICO


En las últimas semanas de febrero, estuvimos inmersos en los usos del poder clerical del Vaticano en México, con la visita del papa Francisco (Jorge Mario Bergoglio), sus mensajes dirigidos contra la corrupción, el autoritarismo, la discriminación, los abusos y la explotación de los pueblos indígenas, el narcotráfico, la delincuencia, la injusticia y las desigualdades con sus lacras de pobreza y precarización de la economía en las familias que violentan y deshumanizan nuestra sociedad, lo mismo se dirigieron a los personajes de la oligarquía de la iglesia en nuestro país, como a la de los políticos, gobernantes y empresarios, que luego con el cinismo y desvergüenza usaron protagónicamente, sin sentirse aludidos, mucho menos responsables de los problemas religiosos, económicos, sociales, culturales y políticos que en las últimas décadas se han incrementado obstaculizando el desarrollo humano y social que nos merecemos. Sin duda el gran vacío en sus discursos, fue su silencio contra la pederastia clerical, que prevaleció por décadas, con los Legionarios de Cristo del padre Marcial Maciel, y que han seguido prevaleciendo en algunas regiones del país; uno más fue la de los asesinatos colectivos con la responsabilidad del estado mexicano, donde ha imperado la impunidad, la más reciente contra estudiantes, realizados en el 2014 en Ayotzinapa, sin dejar de señalar, los sucesos de Acteal, Salvárcar, San Fernando, Allende, Tlatlaya, Tanhuato, Tierra Blanca y Apatzingán así como las más recientes del Penal de Apodaca,  y Topo Chico en Nuevo León.

Para nada tocó, el problema central del paradigma de los usos del poder del neoliberalismo, que prevalece en los gobernantes de nuestras sociedades, sobre todo subdesarrolladas y de desarrollo económico medio, como clasifican a nuestro país, tema señalado en su Carta Encíclica, Laudato si’: Sobre el Cuidado de la Casa Común, donde refiere: “Si el Estado no cumple su rol en una región, algunos grupos económicos pueden aparecer como benefactores y detentar el poder real, sintiéndose autorizados a no cumplir ciertas normas, hasta dar lugar a diversas formas de criminalidad organizada, trata de personas, narcotráfico y violencia muy difíciles de erradicar. Si la política no es capaz de romper una lógica perversa, y también queda subsumida en discursos empobrecidos, seguiremos sin afrontar los grandes problemas de la humanidad”, (disponible en internet en la página: http://w2.vatican.va/content/francesco/es/encyclicals/documents/papa  francesco_20150524_enciclica-laudato-si.html.)

En México y en Nuevo León han sido los grupos económicos quienes detectan el poder real, ya Andrés Manuel López Obrador, los ha descrito en sus ensayos, como  “La mafia que se adueñó de México.”, siguen con sus simulaciones, desviaciones y perversiones,  privilegiando sus intereses económicos, amenazándonos no sólo con discursos empobrecidos, política y filosóficamente, sino con estrategias inmersas en la manipulación mediática con sus lacras de la mercadotecnia que ha llegado a penetrar y hacer sucumbir hasta los grupos sociales más escolarizados y bregados en las luchas progresistas contra el ignominioso conservadurismo y sus anclas que inhiben la libertad y el desarrollo humano.

El ejemplo más patético, lo estamos viviendo en Nuevo León, con el experimento, de estos poderes facticos, que lograron manipular hasta ciudadanos progresistas e intelectuales de izquierda, con el espejismo de la “ciudadanización independiente del poder”, con su previa estrategia permanente de partidofobia y ante el hartazgo de la población de los políticos y funcionarios corruptos, que nos han gobernado,  que ellos mismos generaron y mantuvieron, incluyendo a Jaime Rodríguez Calderón. Este gobernante “independiente”, a más de 7 meses de su triunfo y cuatro meses de gobierno, ha mostrado sus incapacidades en el control político, administrativo, económico, de la impartición de justicia y seguridad en el estado, pero sobre todo en lograr que prevalezca el imperativo ético en sus conductas personales y de gobierno. Su gobierno no sólo ha ejecutado políticas públicas diametralmente opuestas a sus propuestas de su campaña política, mintiendo con cinismo, extendiendo sus manipulaciones y engaños, sin escrúpulos y con despotismo. El principal engaño, ha sido integrar su gabinete con personalidades de dudosa probidad y honestidad, las mayorías beneficiarias y vividoras de la corrupción de los gobernantes anteriores, como los depredadores ambientales, de las empresas inmobiliarias, del transporte, de los servicios públicos, de la industria de la construcción y de las proveedoras de bienes y servicios a los gobiernos; como reforzaría hace unos días el alcalde de San Pedro, Mauricio Fernández, algunos son empresarios, otros connotados ex –priistas y panistas, otros más con la bandera de “ciudadanos independientes”, apartidistas. La corrupción administrativa de sus funcionarios y la aberrante tragedia  del Penal de Topo Chico, son sólo el inicio de las consecuencias de su gobierno despótico.

Hoy con mucho bombo, presenta el gobierno de JRC, su plan de restructuración administrativa, que no hace sino reforzar a quien está sirviendo, consolidando su personalidad política sátrapa al igual que los anteriores gobernantes (Medina, González Paras, los Clariond y los Rizo) y de los que padecemos en el país, como los Peña Nieto, Moreira, Moreno Valle, los Duarte, Ramírez Garrido y los Mancera, seguirán orientados a satisfacer las necesidades financieras de los poderosos, sometiendo la economía a la política, contrariando hasta la tesis del papa Francisco: “La política no debe someterse a la economía y ésta no debe someterse a los dictámenes y al paradigma eficientista de la tecnocracia. Hoy, pensando en el bien común, necesitamos imperiosamente que la política y la economía, en diálogo, se coloquen decididamente al servicio de la vida, especialmente de la vida humana.”;  muy lejos, además  de su llamado a una “nueva economía más atenta a los principios éticos y para una nueva regulación de la actividad financiera especulativa y de la riqueza ficticia”, más lejos de lograr su anhelo: “La grandeza política se muestra cuando, en momentos difíciles, se obra por grandes principios y pensando en el bien común a largo plazo”.

Son y seguirán siendo depredadores de la política, acaban rápido con sus ilusionados seguidores, víctimas de los espejismos y su manipulación mediática como salvadores de la sociedad, revolucionarios del cambio y sus tonterías de una sociedad sin partidos políticos, enarbolando su “independencia ciudadana”, encubriendo su verdadero rostro de estar al servicio de las oligarquías conservadoras, fortaleciéndolas para que no se integren las ideologías filosóficas, éticas, económicas y políticas que han logrado los más altos desarrollos de las personas y sus sociedades, como sucede en los países escandinavos, donde se han suprimido las brechas de desigualdad, las lacras de la corrupción, pobreza, el hambre y la marginación social.

Son políticos y empresarios conservadores, perversos, sin escrúpulos, mandones, que con sus paradigmas del uso del poder, seguirán obstaculizando el logro de los más altos niveles de desarrollo humano que nos merecemos los mexicanos y mexicanas.

Cuando menos, estos personajes muy inmersos en el catolicismo, deberían de integrar las ideas y pensamientos del Papa Francisco, nosotros simplemente validamos las razones  de nuestro activismo opositor que desde hace décadas tenemos contra este régimen de oprobio, donde hoy hasta la iglesia coincide, en algunos temas, con nuestra lucha con MORENA.

viernes, 19 de febrero de 2016

LA PERSISTENTE PESTE DE LA MANIPULACION MEDIATICA


Si en el pasado, la peste como enfermedad infecciosa diezmo a la humanidad, matando a millones de víctimas, en todos los continentes, contagiadas en todo el mundo, con sus grandes pandemias en los siglos IV, XIV y XVIII,  hoy la más terrible epidemia, lamentablemente silenciosa, que ocasiona miles de víctimas en el mundo, es la manipulación de los medios informativos generadores de desinformación, prestos al amarillismo y sus notas rojas, distractores de la atención de los problemas sociales, promotores del individualismo, del hiperconsumismo,  pervertidores de las relaciones fraternales y solidarias, inmersos en su mercantilismo atroz,  inhibiendo  nuestro desarrollo humano y social, al servicio de los grandes poderes facticos económicos y  políticos.

Sus agentes persisten con gran impunidad, confabulados con los gobernantes, como lo han referido en sus ensayos e investigaciones, Michael Foucault, Noam Chomsky y Giovanni Sartori, inhibiendo  la capacidad de crítica del sujeto, su razonamiento y el funcionamiento cognoscitivo, a partir de sus manipulaciones informáticas y la creación de una realidad social que se estructura de acuerdo a su visión hegemónica. Siempre prestos al poder gubernamental, para controlar la información, matizarla, distorsionarla, dosificarla, filtrar infundios, dramatizar, sin faltar el uso de sus retoricas sensibleras de supuestos compromisos con las víctimas. Se trata de ser generadores de prejuicios, mentiras, miedos, irracionalidades, temores, frivolidades, fantasías, autoritarismos, falsas identidades, letales para que asumamos posturas activas y racionales, no sólo en la defensa de nuestros derechos fundamentales como humanos, sino en asumir con plena conciencia, la atención de nuestras responsabilidades para mantener ese bienestar físico, mental y social que define nuestra salud.

Por eso, aunque parezca extremista, la manipulación mediática, hoy más reforzada por la tecnología de la informática y sus redes del internet,  creo que se han convertido en la peste moderna, coadyuvante en los cientos de miles de personas víctimas del suicidio, el homicidio, los accidentes, el cáncer, la desnutrición, la obesidad, el abuso del alcohol, el tabaco y las drogas, entre otras causas que siguen diezmando a nuestras poblaciones en el mundo. Las cifras siguen impresionando y creciendo cada año, según la OMS, por año,  hay de 10 a 20 millones de intentos de suicidio, de estas,    842, 000 personas lo logran anualmente; cada año mueren en el mundo 3,3 millones de personas a consecuencia del consumo nocivo de alcohol, lo que representa un 5,9% de todas las defunciones, es en el grupo etario de 20 a 39 años, un 25% de las defunciones son atribuibles al consumo de alcohol, luego 40 % de las muertes por accidentes de tránsito ocurren bajo la influencia del alcohol. Por otra parte, 800 millones de personas en el mundo sufren de hambre y desnutrición, alrededor de 24.000 personas mueren cada día de hambre o de causas relacionadas con el hambre., en 75% de los fallecidos son niños menores de cinco años. Paradójicamente se calcula que la obesidad y el sobrepeso causaron 3,4 millones de muertes el año pasado. Cada año, los accidentes de tránsito causan la muerte de aproximadamente 1,25 millones de personas en todo el mundo. El cáncer es una de las primeras causas de muerte a nivel mundial; en 2012 se le atribuyeron 8,2 millones de muertes, los que causan un mayor número anual de muertes son los de pulmón, hígado, estómago, colon y mama.

Finalmente, en el recuento de estadísticas,  la ONUDD (Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito), refiere que anualmente existen 468.000 homicidios intencionales, sin contar los muertos en las infames guerras,  esto correspondería a una tasa de 6,9 en todo el mundo. En el 2013, 246 millones de personas de entre 15 y 64 años consumieron estupefacientes ilegales, de estas murieron 187.100, por abuso de drogas.

Lo que tienen en común, todas estas tragedias, es que tienen factores de riesgo comportamentales, alimentarios y ecológicos, donde el sistema mediático, coadyuva en su prevalencia, subordinando sus intereses económicos multimillonarios dedicándose  a hacer fabulosos negocios, incluso con sus decenas de empresas diferentes en diferentes rubros, llegando a perder hasta su capacidad de libertad de expresión. Sus publicidades no tienen límites, reforzadas por el avance de las neurociencias, sus técnicas del neuromarketing, logran la gran impunidad,   mienten, engañan y engatusan a la población para el hiperconsumo, mas con sus artículos y procesos milagrosos curadores y restablecedores de la salud, aun de las enfermedades más incapacitantes, que la ciencias médicas no han logrado avanzar en sus tratamientos. Con cinismo, los imperios mediáticos, han organizado y mantienen fundaciones  en sus empresas, prestadoras de servicios de salud y educación, distorsionando el humanismo solidario y fraternal, con sus asistencialismos caritativos mediocres, explotadores de las necesidades y sentimientos alterados, de quienes sufren esas tragedias, en tanto oculta, matizan, evitan que la población integre la conciencia de estos servicios como obligación del estado

Más lejos están de actuar como vínculo democrático, que nos informa de modo objetivo e imparcial sobre los acontecimientos sociales, muchas veces, nos entretiene con su amplia y poco variada programación dirigida, como dice Pierre Bourdieu, a cubrir su objetivo de lograr que las “creencias colectivas se materialicen siempre en la práctica cotidiana de los sujetos, por lo que los hechos “evidentes” no pueden ser negados a costa de perder todo tipo de credibilidad social”.

Lejos estamos de acabar con su lógica de manipulación ideológica, inmersas en sus estrategias discursivas, apelando a la mentira, el relato ficcional de realidades con sus shocks informativos; o bien manipulando o tergiversando la realidad de los hechos que dicen informar, que adaptan a sus propios intereses, sacando de contextos frases, interpretando sesgadamente, destacando titulares; ocultando información que pueda afectar económicamente a la empresa, promover parte de la noticia que se encuentra resaltada de forma intencional para tergiversar la información y promover la lectura selectiva, no dudan en reiterar información irrelevante o secundaria de forma insistente y monotemática y no se diga su persistente ataque sistemático a los adversarios políticos de la empresa mediática, destacando y a enfatizando de forma sistemática la información que pueda

Para quienes luchamos por el desarrollo humano y social de nuestros habitantes, existe un imperativo ético-político irrenunciable que consiste en oponerse con todas las fuerzas a estas corporaciones oligopólicas de medios que, resultan además, uno de los principales impedimentos al desarrollo de una verdadera democracia que todos anhelamos alcanzar en su plenitud.

Si el final de la peste, como epidemia, que prevaleció en el Feudalismo, significó el fin de esa etapa obscura de nuestra humanidad, emergiendo el resplandor del Renacimiento, espero que coadyuvemos a acabar con la peste de la manipulación mediática que nos permita avanzar a la Modernidad esplendorosa de este milenio.


viernes, 12 de febrero de 2016

LA MASACRE DEL PENAL DE TOPO CHICO


Ayer nos conmociono a todos los mexicanos, las hechos suscitados, donde fueron asesinados 49 personas, en el interior del Centro de Prevención y Readaptación Penal, ubicado en la tradicional zona del Topo Chico, al norte de Monterrey, Nuevo León, que constituye un territorio donde viven miles de ciudadanos, en un gran número de colonias y barrios en situaciones de marginación y pobreza e históricamente con altos índices de criminalidad; son terrenos y viviendas que sus habitantes han adquirido en las políticas sociales de los gobiernos, algunos regularizados, al haber sido posesionados por los movimientos urbanos populares de la década de los setentas del siglo pasado y que terminaron siendo las clientelas políticas de todos los partidos (PRI-PAN-PT-PRD-PANAL) que han estado integrados en los deferentes poderes en el estado

Es en esta zona, donde desde hace más de cuarenta años, he ejercido la medicina, desde mis tiempos de estudiante y luego como profesionista médico de la Secretaria de Salud, en los Centros de Salud, Nueva Morelos, Topo Chico, Clínica Tierra y Libertad, donde además he desempeñado funciones de director, y desde hace 12 años, en el Centro Comunitario de Salud Mental Tierra y Libertad. Ha sido también, mi área de activismo político, en el bregar de los años, con los diferentes movimientos sociales, organizaciones y partidos políticos, opositores al régimen de oprobio que los mexicanos hemos padecido.

Resulta que fue en este Penal de Topo Chico, donde acepte una plaza laboral de Médico, en el año de 1980, posterior a un motín de reos, que se había desarrollado el 27 de marzo, donde asesinaron  a su director, el Capitán Alfonso Domene Flor Milán y a tres de sus secretarias, murieron además algunos reos, oficialmente tres, la verdad nunca se supo. Me integré en el mes de junio, era un reto, el colega que me invitaba, me refería que ante los acontecimientos, ningún médico quería trabajar en ese penal, dure sólo seis meses, las realidades que afronte sobre el funcionamiento interno, inmerso en violaciones a los derechos fundamentales de los reclusos, con las lacras de las injusticias, corrupción e impunidad en todos los niveles, desde el director hasta los celadores, que se confabulaban con los delincuentes en la gobernabilidad del interior de sus territorios.

Hace casi 4 años, después de la tragedia del otro Centro de Reinserción Social ubicado en el municipio de Apodaca en nuestro estado de Nuevo León, donde murieron 44 personas y se fugaron 30 reos de alta peligrosidad, escribí en este mismo blog (http://drricardoaguilar.blogspot.mx/2012/02/las-tragedias-en-las-carceles-mexicanas.html) las problemáticas que persisten en el sistema penitenciario de nuestro país, referí lo que por sexenios de gobiernos, ha sido una de las políticas públicas, no sólo atrasadas sino ignominiosas de los gobernantes priístas y panistas que han estado en el poder. Lo peor que nos ha sucedido en Nuevo León, es que nuestro gobernante “independiente” actual, Jaime Rodríguez Calderón, siga con sus comportamientos y paradigmas del quehacer en la gobernabilidad, reproduciendo lo mismo que los pripanistas, después del engaño mediático que generó en su campaña electoral, que logro engatusar a connotadas personalidades progresistas e intelectuales de nuestra comunidad.

Si nuestra sociedad estuviera inmersa en la prevalencia de los imperativos legales, éticos y de justicia, todos los funcionarios inmersos en las responsabilidades de esta masacre, deberían de ser procesados no sólo por las leyes civiles, sino penales. Por dignidad, el gobernador no sólo debiera pedir perdón por sus graves omisiones, en estos meses iniciales de su mandato, sino transformar su personalidad y estilos de quehacer político, si no seguirán llevándonos a otras ignominiosas tragedias.

Refrendo lo que concluí en ese artículo: estos hechos abominables representan el paradigma de las tragedias derivadas de la corrupción, injusticia e impunidad, que padecemos en nuestra patria gobernada por políticos deshonestos, mediocres, perversos y cínicos.

El manejo mediático, con sus manipulaciones de esta tragedia, es uno de los ejemplos de esa peste, la de la “manipulación mediática”,  que les compartiré la próxima semana.

lunes, 8 de febrero de 2016

LOS GRUPOS HUMANOS E INSTITUCIONES SALUDABLES


Sigo observando, en los diferentes ámbitos institucionales, profesionales, laborales, políticos y sociales, más en los que me desenvuelvo, la prevalencia de prejuicios en las relaciones humanas, sí, esos pensamientos prepensados, que se conservan y se repiten porque satisfacen tendencias emocionales, que muy pocas veces se asumen de manera consciente y que obstaculizan no sólo el desarrollo humano de las personas, sino el desarrollo organizacional necesario que permitan lograr exitosamente las metas de los grupos humanos inmersos en las diferentes instituciones de nuestra sociedad.
Estas condiciones emocionales, evidentemente emanan del funcionamiento mental básico de cada uno de los integrantes y se ponen al servicio de la conducta; son sentimientos que se suman e inducen conductas similares en todo el grupo, lo lamentable es que influyen comportamientos alejados de la racionalidad, con sus afluentes de reflexión y creatividad que permitan la construcción del saber en la solución de problemas para la efectividad de las tareas. Son conductas que pueden conducir a los grupos en los márgenes de la inefectividad, que van desde la prevaleciente dependencia y pasividad hasta la amenazante agresión, destructividad y violencia, sin desdeñar los espectros intermedios donde emergen la simulación, la desconfianza, la manipulación y el engaño.
Son condiciones que serán responsables de la aparición de fenómenos peligrosos para lograr el fundamental trabajo en equipo, pero sobre todo amenazantes sobre la salud mental de sus integrantes, generando lo que se ha denominado la psicopatología institucional, sobre todo en las relaciones laborales, cuyos extremos son al persistencia del estrés y sus síntomas de ansiedad, depresión y alteraciones psicosomáticas, hasta el denominado mobbing, consistente en el acoso laboral o moral, donde la persona o grupo de personas reciben una violencia psicológica injustificada a través de actos negativos y hostiles, dentro o fuera del trabajo, por parte de sus compañeros, de sus subalternos o de sus superiores; además tenemos el padecimiento del síndrome de burnout, con sus síntomas clásicos de neurastenia. 
Las conductas más comunes en los grupos, generadoras de conflictos son: 1. Luchas agresivas por el liderazgo, crítica destructiva, descalificación de los demás, ideas mesiánicas y grandiosas acerca de tener la verdad absoluta, devaluación y humillación de los demás, búsqueda de formas de enriquecimiento a través de la trampa e influyentismo, búsqueda inadecuada de la proyección personal, abusando del trabajo de los otros; 2. El plagio de ideas y programas, generación de rumores, ataques frontales personalizados, abuso y distorsión de la información buscando un beneficio personal, abuso de la confianza de las personas de la institución, uso de las redes de comunicación para auto promoverse en base a la descalificación y devaluación de otras personas; y  3. Generación y promoción de calumnias hacia una o varias personas, exhibir defectos de los demás, buscando prestigio y proyección política, alimentar una necesidad únicamente exhibicionista y narcisista sin importar como se afecta al resto del grupo.
Identificar estas conductas y lograr su prevención, fomentando estilos saludables de relación en el seno de la interacción humana de los grupos en las instituciones, es lo que algunas sociedades de las mayo desarrollo humano en el mundo, como las de los países bajos, han integrado como uno de sus indicadores básicos, el estado de las relaciones sociales en el seno de la sociedad y sus grupos, para calificar el estado de desarrollo humano, superando los indicadores básicos de la OMS, compuesto por tres parámetros: vida larga y saludable, educación y nivel de vida digno.