Recordaba a Maurice Duverger en su famoso libro “Los Partidos Políticos” donde investigó las conductas políticas partidarias en sus denominados "círculos interiores" de los partidos, en los años cuarenta del siglo pasado, y en los cuales observó el alejado funcionamiento de sus reglamentos internos y los correlaciono con la naturaleza oligárquica y autocrática de los dirigentes, que ya había señalado Robert Michels, también en su obra: “Los Partidos Políticos” con su famosa ley de hierro de las oligarquías, que establecía “un partido político nunca sería democrático porque en la propia organización estaba el germen de la oligarquía”. Eran los tiempos en que cuando menos, en los partidos de izquierda, las decisiones centralizadas se enmarcaban en discusiones ideológicas de las tesis y experiencias políticas que las doctrinas de izquierda y/o liberales experimentaban en las diferentes sociedades que entonces, en algunos países, iniciaban profundos cambios revolucionarios, y en otros se gestaban movimientos políticos y filosóficos tratando enriquecer las luchas por un mejor desarrollo social y humano; no predominaban los intereses por el acceso a las posiciones de sus burocracias internas, los puestos electorales o de los gobiernos, como motivo central de sus posturas.
Viene al caso, esta asociación, por mi reacción nauseosa hacía el primitivo proceso, que se gestó en la mesa de diálogo que los partidos políticos integrantes del Movimiento Progresista (PRD, PT y MC), Morena y representantes empresariales “Progresistas” de Despierta México, desarrollaron para lograr la unidad para el trabajo político en nuestro estado de Nuevo León, intentando funcionar conforme a un funcionamiento colegiado, donde se diera el dialogo, la búsqueda de consensos y las decisiones que mejor favorecieran a nuestro candidato Andrés Manuel López Obrador (AMLO), para lograr el mayor numero de votos que coadyuvara a la victoria hacía la presidencia de México, el próximo 1 de julio del presente año. Resulta que dicho proceso, finalmente nada tuvo de colegiado y no sólo no privilegió la unidad para las tareas político electorales sino además estuvo ausente la reflexión ideológica y sólo sirvió para incrementar o saciar los enconos personales, que llegó a desbordar en la primitiva violencia verbal y la amenazante violencia física de algunos dirigentes de los partidos de izquierda y progresistas que perdían los valiosos tiempos en sus diatribas mas que en el análisis y propuestas de fondo de los problemas que se abordaban en esas reuniones donde siguen prevaleciendo la verborrea, impuntualidad, el desorden y el incumplimiento de las tareas.
En el primer objetivo de lograr candidatos al senado y diputados federales con perfil, posesionados y experimentados en el trabajo político electoral, para nada les importo el valioso periodo de las precampañas para los precandidatos, establecidos por el Instituto Federal Electoral (IFE), no existió una sola precampaña de proselitismo que contribuyera al trabajo político de la coalición. En sus reuniones, los problemas iniciaron con la exigidas listas de nombres de las personas que proponían, no cediendo para nada en sus dominios territoriales, clientelares y corporativos, ni siquiera porque nunca han logrado victorias electorales, ni hubo encuestas serias que midieran el posicionamiento de las personas propuestas, mucho menos estuvo a discusión las posiciones plurinominales, patrimonio de sus familias y subordinados. Luego el único partido que hizo intentos de entrevistar a los “enlistados” en esa mesa, fue el PT, en entrevistas acartonadas, simulando el análisis, de café, sin eficiencia organizacional; en el resto de los partidos, el conocimiento de los propuestos se guiaba por lo conocido y lo que se informaba en las reuniones. Resulta que los tiempos desbordaban y estando al límite de la fecha para el registro ante el IFE, los integrantes de esta mesa de trabajo desesperaron a los dirigentes del PT, quienes tienen a cargo la coordinación electoral en este estado y la tercera circunscripción electoral federal, y fueron a reunirse con los empresarios de Despierta México, para “palomear” una primera lista que estaría sujeta al cumplimiento de las necesidades de las otras cúpulas partidistas donde sus dirigentes harían ajustes, sobre todo para cubrir las cuotas de genero. Luego, el proceso de legitimación política y jurídica de esta propuesta, correría a cargo de los dirigentes nacionales de los partidos, quienes dando línea a sus subordinados en el estado, no mostraron mucha resistencia, sobre todo porque no estaban en juego las plurinominales, se respetaban los dominios clientelares y porque quienes lo impulsaban ofrecían mejores perspectivas de apoyo en recursos para sus campañas electorales.
En el primer objetivo de lograr candidatos al senado y diputados federales con perfil, posesionados y experimentados en el trabajo político electoral, para nada les importo el valioso periodo de las precampañas para los precandidatos, establecidos por el Instituto Federal Electoral (IFE), no existió una sola precampaña de proselitismo que contribuyera al trabajo político de la coalición. En sus reuniones, los problemas iniciaron con la exigidas listas de nombres de las personas que proponían, no cediendo para nada en sus dominios territoriales, clientelares y corporativos, ni siquiera porque nunca han logrado victorias electorales, ni hubo encuestas serias que midieran el posicionamiento de las personas propuestas, mucho menos estuvo a discusión las posiciones plurinominales, patrimonio de sus familias y subordinados. Luego el único partido que hizo intentos de entrevistar a los “enlistados” en esa mesa, fue el PT, en entrevistas acartonadas, simulando el análisis, de café, sin eficiencia organizacional; en el resto de los partidos, el conocimiento de los propuestos se guiaba por lo conocido y lo que se informaba en las reuniones. Resulta que los tiempos desbordaban y estando al límite de la fecha para el registro ante el IFE, los integrantes de esta mesa de trabajo desesperaron a los dirigentes del PT, quienes tienen a cargo la coordinación electoral en este estado y la tercera circunscripción electoral federal, y fueron a reunirse con los empresarios de Despierta México, para “palomear” una primera lista que estaría sujeta al cumplimiento de las necesidades de las otras cúpulas partidistas donde sus dirigentes harían ajustes, sobre todo para cubrir las cuotas de genero. Luego, el proceso de legitimación política y jurídica de esta propuesta, correría a cargo de los dirigentes nacionales de los partidos, quienes dando línea a sus subordinados en el estado, no mostraron mucha resistencia, sobre todo porque no estaban en juego las plurinominales, se respetaban los dominios clientelares y porque quienes lo impulsaban ofrecían mejores perspectivas de apoyo en recursos para sus campañas electorales.
Resulta que las cúpulas de los partidos salvaguardaron para sus cuadros dirigentes, las valiosas plurinominales, el PT repite con sus listas al líder nacional Alberto Anaya y Ricardo Monreal, que seguirán como diputados federales, al igual que Ricardo Cantú, Silvano Garay y Adolfo Orive; Pedro Vázquez ahora será Senador, conjuntamente con el personaje cuestionable de Manuel Bartelett. En el PRD prevalecen entre las diputaciones federales plurinominales las de Alfonso Raya, Amalia García Medina, Fernando Belaunzaran, Marti Batres, Socorro Ceseñas, y en el senado, Luis Miguel Barbosa, Luis Sánchez, Dolores Padierna, Angélica de la Peña y José Narro. Así para el día 15 de Marzo estaba definida la lista de candidatos por mayoría al Congreso de la Unión por Nuevo León, que luego AMLO respaldaría en un evento público para los medios conjuntamente con los empresarios y algunos de los dirigentes partidistas. A algunos nos sorprendería la presentación, en ese evento, de dos candidatos de los empresarios en las elecciones locales, porque no estaba todavía definido el acuerdo político y jurídico de la Coalición del Movimiento Progresista para participar en unidad en las elecciones locales; Uno era Ricardo González Sada, Ex presidente de la COPARMEX para la alcaldía de San Pedro, y el otro Gilberto Miranda de la organización Despierta México para la alcaldía de San Nicolás.
En el marco del segundo objetivo, de lograr la unidad de estas mismas organizaciones de la Coalición Movimiento Progresista, Morena y Despierta México, para postular candidatos en unidad para las 26 diputaciones locales y los integrantes de los 51 ayuntamientos del estado de Nuevo León, resulta que por sus distracciones y desorganizaciones el tiempo limite para el registro de coaliciones que marca la ley estatal electoral en Nuevo León los acoto y el último día sólo el PRD y MC ingresan una solicitud de registro para participar coaligadamente, el PT no quiso participar. Las discusiones se entramparon nuevamente porque nadie quería ceder en sus dominios territoriales que definen las posiciones plurinominales de diputados locales, porque la ley local electoral los asigna conforme a los resultados de campaña de los candidatos de los partidos, no se asignan por listados; quienes aspiran a una plurinominal tienen que ser candidatos y lograr los porcentajes mas altos de votos electorales para sus partidos. Luego en relación a los candidatos a las 51 alcaldías e integrantes de los ayuntamientos, el problema fundamental que los enconaba era la defensa de las primeras regidurías de las planillas de ayuntamiento, que son seguras de obtener plurinominalmente para sus partidos. Jamás estuvo en análisis y discusión un proyecto serio de trabajo político en esta coyuntura electoral para avanzar en el fortalecimiento de la izquierda y movimientos progresistas del estado, mucho menos escenarios de dialogo sobre la construcción de una plataforma política que enmarque el rol transformador de la izquierda en los gobiernos municipales y el poder legislativo en el estado, ni siquiera trascendió el papel indispensable del trabajo en unidad para contribuir a la victoria electoral de AMLO. Literalmente mandaron al diablo los llamados a las tareas políticos electorales en unidad, que hemos hecho en MORENA y con AMLO. Finalmente la solicitud, de la Coalición Movimiento Progresista de Nuevo León (PRD y MC), no fue aceptada por La Comisión Estatal Electoral (CEE), la cual consideró no procedente otorgar el registro por no acreditar la totalidad de los requisitos que marca la ley. Entre otros requerimientos expresaron: “dichas entidades políticas no presentaron plataforma electoral ni emblema o logotipo de los partidos que pretendían coaligarse, no señalaron a una de las entidades políticas como responsable financiero y/o representante común de la coalición”, segun su presidente. Lo cual no sólo muestra sus incapacidades profesionales en la política sino su arraigada simulación para satisfacer sus intereses mezquinos. Así, que tanto el PRD, como el PT y MC presentaran candidatos que sólo les sirvan para lograr sus plurinominales, serán usados con el espejismo de recibir apoyos económicos para sus campañas, satisfacer sus protagonismos, recibir beneficios posteriores y posibilidades victoriosas por la popularidad de AMLO. Sus candidatos plurinominales ya están definidos para satisfacer a sus familiares y dependientes económico políticos con las regidurías y diputaciones plurinominales. El PT ya informo que en sus dominios territoriales irán como candidatos a diputado local en el distrito I, Zeferino Juárez, por el distrito local 2, donde está la joya de su corona: la colonia Tierra y Libertad, nada menos y nada mas que Guadalupe Rodríguez Martínez, por el distrito 3 el candidato será Sergio Arellano, los demas, amigos y familiares estan siendo procesados para que se acomoden en regidurías plurinominales de los ayuntamientos de la zona metropolitana de Monterrey.
Por su parte, el PRD informo que ya tiene sus candidatos para las 26 diputaciones y las 51 alcaldías, destacando la satisfacción de sus dirigentes: Eduardo Arguijo Baldenegro como candidato a diputado local en su distrito 20, luego de su fracasado intento de ser diputado federal plurinominal, donde se encuentran sus dominios territoriales aclientelados en el municipio de García, quien tambien definira la integración de la planilla para ese ayuntamiento. Rubén Mario Garza y su grupo de San Nicolas, de negro historial politico, les han satisfecho sus intereses protagonicos, con afanes de palear sus problemas economicos, al concederles no sólo la candidatura a la alcaldía de San Nicolás, para su compañera Sandra Guerra sino otorgarles las primeras regidurías y las candidaturas de los distritos locales, donde irán en el noveno, Jesús Daniel Treviño Legaspi, en el décimo, Benito Valdez Moreno y en el undécimo, designaron a July Koylor Bejar Chapa. El resto de los grupos de interés recibieron sus posiciones s contentillo para luego legitimarlos política y jurídicamente conforme a sus reglamentos y disposiciones de las dirigencias nacionales de sus tribus.
Así estos hechos demuestran que se terminó en un pragmatismo político electoral ramplón de los dirigentes políticos de los partidos de izquierda, que repiten en cada elección, sin visión de futuro, acotados por incrementar o mantener sus míseros poderes a los que se han sometido por las condiciones y circunstancias impuestas por los oligarcas, que ha desbordado las capacidades organizativas caricaturizando sus convicciones ideológicas revolucionarias hoy menoscabadas por sus necesidades de mantener el poder domesticado que los regimenes pripanistas y sus oligarquías les han otorgado para seguir estando subordinados en su quehacer político.
Son conductas políticas preocupantes, propias de políticos perdedores, sin escrúpulos ni convicciones “revolucionarias”, que además de que producirán graves daños en las actividades político electorales a favor de AMLO en Nuevo León, nada tienen que ver con la revolución de las conciencias que pretendemos con MORENA y el debate sobre la sociedad que queremos construir donde prevalezca la libertad, la democracia y la justicia, iniciando con los cambios que proponemos en el Proyecto Alternativo de Nación.
Por su parte, el PRD informo que ya tiene sus candidatos para las 26 diputaciones y las 51 alcaldías, destacando la satisfacción de sus dirigentes: Eduardo Arguijo Baldenegro como candidato a diputado local en su distrito 20, luego de su fracasado intento de ser diputado federal plurinominal, donde se encuentran sus dominios territoriales aclientelados en el municipio de García, quien tambien definira la integración de la planilla para ese ayuntamiento. Rubén Mario Garza y su grupo de San Nicolas, de negro historial politico, les han satisfecho sus intereses protagonicos, con afanes de palear sus problemas economicos, al concederles no sólo la candidatura a la alcaldía de San Nicolás, para su compañera Sandra Guerra sino otorgarles las primeras regidurías y las candidaturas de los distritos locales, donde irán en el noveno, Jesús Daniel Treviño Legaspi, en el décimo, Benito Valdez Moreno y en el undécimo, designaron a July Koylor Bejar Chapa. El resto de los grupos de interés recibieron sus posiciones s contentillo para luego legitimarlos política y jurídicamente conforme a sus reglamentos y disposiciones de las dirigencias nacionales de sus tribus.
Así estos hechos demuestran que se terminó en un pragmatismo político electoral ramplón de los dirigentes políticos de los partidos de izquierda, que repiten en cada elección, sin visión de futuro, acotados por incrementar o mantener sus míseros poderes a los que se han sometido por las condiciones y circunstancias impuestas por los oligarcas, que ha desbordado las capacidades organizativas caricaturizando sus convicciones ideológicas revolucionarias hoy menoscabadas por sus necesidades de mantener el poder domesticado que los regimenes pripanistas y sus oligarquías les han otorgado para seguir estando subordinados en su quehacer político.
Son conductas políticas preocupantes, propias de políticos perdedores, sin escrúpulos ni convicciones “revolucionarias”, que además de que producirán graves daños en las actividades político electorales a favor de AMLO en Nuevo León, nada tienen que ver con la revolución de las conciencias que pretendemos con MORENA y el debate sobre la sociedad que queremos construir donde prevalezca la libertad, la democracia y la justicia, iniciando con los cambios que proponemos en el Proyecto Alternativo de Nación.
Lamentablemente, las luchas intestinas de los dirigentes de los partidos de izquierda, como suceden en Nuevo León, se reproducen en todo el país obstaculizando su propio desarrollo politico para estar acorde a las necesidades y demandas historicas de nuestra patria.
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