viernes, 23 de diciembre de 2016

FELIZ NAVIDAD 2016

En medio de la violencia que estamos padeciendo los mexicanos y mexicanas con los hechos trágicos de los feminicidios y la abominable prevalencia de la violencia contra las mujeres, que sigue ensañándose hasta con las mujeres ejemplares como lo sucedido a nuestra olimpista y senadora de nuestro país, Ana Guevara, se impone exigirnos la paz y fomentar las relaciones amorosas, fraternales y solidarias, en todos los ambientes donde interactuamos, desde la familia, la escuela, nuestro centros de trabajo hasta en la comunidad y en las mismas calles donde transitamos, sólo así estaremos haciendo honor y siendo congruentes con el espíritu navideño, sus valores y principios que enaltecen el significado cristiano de estas fechas.

Se trata de vivenciar un año mas, el renacimiento y con ello la esperanza para que los principales valores cristianos prevalezcan en el seno de nuestras sociedades, para luchar contra la despiadada deshumanización que amenaza desintegrarnos socialmente, como ya lo refería en este blog, en un articulo sobre este tema. Son valores que deben estar integradas en las posadas, en la cena navideña y demás convivencias festivas de esta época, donde no deben existir las envidias, los enojos, el miedo, las angustias, menos los insultos, las ofensas, sino el sentimiento gozoso del amor con sus afluentes de bondad y generosidad, ejerciendo la virtud del perdón, generando la felicidad del ser, del estar con nuestras familias, compañeros, amigas, amigos, extendiendo la acción solidaria y compasiva, hacia quienes en estos momentos, transitan por tragedias que les impiden esa paz y felicidad que todos quisiéramos que prevaleciera en esta época del año.

2016 ha sido un año mas de crisis económica, política y social que nos ha dañado en nuestro bienestar, donde gobernantes y funcionarios, han sido los principales transgresores de esos valores cristianos que sólo han usado en sus peroratas y rituales publicitarios, haciendo que se incremente no sólo la violencia que padecemos, con los miles de muertos y desaparecidos, sino la corrupción con sus lacras de abuso de poder, robos de los recursos públicos, las mentiras, sus engaños, impidiendo que nuestras familias logren la anhelada paz con prosperidad, sin hambre, pobreza, con vida digna, donde solucionemos los problemas de salud, educación, vivienda y empleo bien remunerado.

No permitamos que estos ejemplares de políticos deshonestos e incongruentes amarguen nuestras convivencias navideñas, menos que logren obstaculizar nuestros sentimientos amorosos para que desborden con el don de la gratitud, de la gracia y el perdón, y así estar en paz consigo mismo y con los demás, enalteciendo la esperanza de un futuro promisorio para nuestras vidas y nuestra sociedad.

Feliz Navidad, vivamos en paz y con amor, promoviendo la felicidad, la solidaridad y el bienestar con los demás.


viernes, 16 de diciembre de 2016

LA DESINTEGRACIÓN SOCIAL EN MÉXICO


Los procesos  de integración social en nuestro país siguen siendo obstaculizados gravemente por los políticos y oligarcas, que detentan el poder en los diferentes niveles de gobierno y en sus responsabilidades básicas de la función del estado, siguen sin poder integrar en la conciencia colectiva las normas y valores que hagan prevalecer la paz, la justicia y el bienestar en todas y todos los mexicanos.

Por un lado el sistema educativo, que juega un rol fundamental para el logro de la internalización de reglas, socialización de sentimientos, ideas y prácticas que fortalezcan el desarrollo moral, sigue ausentándose como eje fundamental de ese proceso desde los niveles básicos hasta superiores, sumándose a sus graves dificultades por lograr los objetivos de aprendizaje, generando las diferentes formas de analfabetismo con personas que no saben leer y escribir, ni las operaciones básicas aritméticas, hasta profesionistas limitados en el saber y el funcionamiento del pensamiento racional y creativo, lo que los hace víctimas de las  estrategias de manipulación de sus conciencias y conductas, en las formas modernas de dominación y explotación que nos ha impuesto el neoliberalismo en su llamada globalización.

Por otro lado el sistema de salud, sigue sin generar el anhelado completo bienestar físico, mental y social, menos la ausencia de enfermedades fácilmente prevenibles, de la mayoría de los ciudadanos, que siguen padeciendo la falta de atención, sin cobertura universal, las carencias de medicamentos e insumos, con un modelo médico de atención reduccionista deshumanizante y mercantilizado, donde se ausenta la atención de los componentes elementales de la salud mental y social de las personas, proyectando la precarización de la integración de los principios y valores en su ejercicio profesional.

El reduccionismo ha llevado a la OMS a insistir en que se atiendan en las políticas públicas de los gobiernos, la salud mental de las poblaciones, por lo que ha declarado contundentemente que sin salud mental, no hay salud física en las personas, hace la recomendación que no sólo se promuevan y fortalezcan los programas de atención a las enfermedades mentales, sino que ademas desarrollen acciones en los procesos de prevención y atención de la salud de las poblaciones, en nuestro país se estima en que más del 75% de las personas que cursan con algún trastorno, no tienen acceso a la atención especializada que se requiere. La conciencia se asienta en el cerebro, como función mental, nos advierte de las realidades, sentimientos, pensamientos y nuestras intenciones, su calidad depende del grado de salud mental de las personas y desde luego del estado que guarda la conciencia colectiva, esto genera la capacidad de razonar sobre su propia existencia y el sentido de la vida.

Por si fuera poco tenemos un sistema de justicia, sin el poder legítimo del derecho para imponer su cumplimiento, sumado a que en todos los niveles del poder judicial,  prevalece la impunidad y la corrupción, incapaz de lograr que sus leyes y las normas se cumplan y estén garantizando la regulación social, fallando en la integración de ese sentimiento de obligatoriedad, respecto de la aceptación de normas y costumbres del derecho, en el que se plasma la reglamentación jurídica a la que los integrantes de una sociedad  están obligados para su convivencia en paz, armonía, con relaciones fraternales y solidarias.

El sistema de seguridad pública del Estado, sigue sin  garantizar la integridad de todos los ciudadanos y sus bienes, prevaleciendo incapacidades para la protección de los derechos humanos, civiles y sociales, sigue además sin lograr instituciones sólidas, preventivas del delito y la rehabilitación de los delincuentes transgresores a las leyes, con el abuso de los mecanismos represores, sin seguridad pública los ciudadanos no pueden convivir en armonía, se potencializan las interacciones sociales con violencia.

En el contexto de la imagen de las figuras de autoridad del Estado que tenemos, en las últimas décadas, desde el presidente, hasta los gobernadores y alcaldes siguen sus devaluaciones infames, por sus conductas inmersas en la corrupción, con sus incompetencias que afectan su desempeño institucional, alejados de las habilidades y destrezas que proporcionan las ciencias básicas y la ética, llegando a admitir sus ilegalidades como lo ha expresado, la semana pasada, el General Francisco  Cienfuegos,  Secretario de la Defensa Nacional de México, al aceptar “Hemos estado actuando en la ilegalidad”, en el desempeño de tareas contra la delincuencia, que no le corresponden al ejército.

La disminución de los principios y valores morales, cívicos y hasta religiosos, conduce a la destrucción y la reducción del orden social, así si las leyes y normas no se integran en el comportamiento humano no pueden garantizar la regulación social, aparece la anomia que Émile Durkheim definió a finales del siglo XIX, “como a la falta de normas o incapacidad de la estructura social de proveer a ciertos individuos de lo necesario para lograr las metas de la sociedad.”; refrendaba que si la anomia, el egoísmo y la competencia disuelven las viejas solidaridades sin crear otras nuevas, la atomización del cuerpo social sería tal que no habría sociedad sino caos.

Es precisamente esta percepción del caos, que debe alarmarnos, y que se empieza a sentir con el prevaleciente miedo, angustia, inseguridad e insatisfacción de la mayoría de los mexicanos ante un Estado incapaz de controlar la violencia, los conflictos, la corrupción, el desorden y lograr solución a los problemas económicos y sociales en un marco de libertad y democracia plena, garante del respeto incondicional a los derechos humanos y sociales para así cambiar el estado de cosas que obstaculiza nuestra plena integración social.

domingo, 11 de diciembre de 2016

CRISIS DE LA PSIQUIATRIA EN MEXICO

Inicie el contacto profesional con la psiquiatría a finales de la decada de los setentas, del siglo pasado, mis maestros de las asignaturas de psicologia médica, psicopatologia, neurologia y psiquiatría en los cursos basicos de mi formacion médica, que desarrollé en la Escuela de Medicina del Instituto de Ciencias de la Salud de nuestro estado, habían despertado mi interes y motivacion por esta area de las ciencias de la salud, a grado tal que, por mis capacidades, me aceptaron desempeñarme como maestro auxiliar en sus cursos, que luego desarrollaron en las generaciones anteriores a la mía. Luego despues de que finalicé mi internado de pregardo hopsitalario, en el marco de mi servicio social, en 1978, fui adscrito al entonces manicomio del estado, denominado pomposamente Casa de Salud Mental, donde su denominacion era una gran contradiccion, ni era ambientalmente un hogar, ni prevalecia su intitulada salud mental, prevalecia el insano ambiente manicomial, carcelario, indiganante y represor sobre los enfermos mentales que estaban internados, algunos de ellos internados, para abusar por sus influyentes familiares en los juicios de interdiccion, para despojarlos de sus patrimonios y derechos; aun mas con  una direccion médica y adminstrativa de lo mas corrupta e impune, que he vivienciado en las instituciones en que he servido como médico. Eso sí, este nosocomio, como casa pertenecia al Desarrollo Integral de la Familia (DIF), luego transitó como Hospital Psiquiatrico Estatal y hoy es denominado Unidad de Rehabilitación Psicosocial (UNIREPSI).

Resulta que en el Instituto de Ciencias de la Salud,  ante la ausencia de alternativas de atención humanizada para las enfermedades mentales, organizamos un centro de atencion a la salud mental, donde un grupo de colegas dirigidos por un especialista en neurologia, psiquiatria y psicoanalisis, fuimos capacitados para la atención psiquiatrica y psicoterapeutica, eran años muy dificiles para nuestra institucion, por enarbolar la la lucha por la reforma academica de la educacion médica, con un plan de estudios que llevabamos, muy diferente a los existentes en todas las escuelas y facultades de medicina de nuestro país, que pretendia la formacion de un médico mas integral, humanista, solidario, preventivo y social, pero sobre todo contra las lacras del ejercicio de la medicina mercantilista, que prevalecia en la medicina privada y que ya asomaba en las instituciones del sector salud y la seguridad social. Los grupos médicos en el poder usaron toda su capacidad represora, no sólo nos expulsaron del seno  de la Universidad Autonoma de Nuevo León, que nos había creado com el apoyo financiero, legal, adminstrativo y academico correspondiente, sino ademas obstaculizando luego, como escuela libre, nuestro reconocimiento a la validez oficial de nuestros estudios por el estado, el cual tardamos en lograr hasta dos años despues de que egresamos la primera generacion, aunque su ira de la barabrie siguio negandonos el derecho a realizar los examenes para seleccion de ingreso a los postgrados en la misma UANL y quienes lograbamos  ingresar, eramos detectados y expulsados fascistoidemente.

Eran los años, donde el modelo de atención psiquiatrica que prevalecia en el mundo enfrentaba una gran crisis, surgiendo las grandes propuestas innovadoras de reformas a la salud mental, que incluían terminar con esas aberrantes institucionales manicomiales y revisar profundamante las bases cientificas de la psiquiatria, con un movimiento denominado antipsiquiatria, que luego influyeron en la integracion de paradigamas de atención integral y humanista de los enfermos mentales, dignificando mediante el respeto incondicional de los derechos humanos y sociales fundamentales de los pacientes. Propuestas que lamentablemente sólo han sido integradas parcialmente, en nuestro país haciendo prevalecer un sistema de atencion a las enfermedades mentales, donde no sólo existe  la falta de acceso a la atención especializada psiquiatrica y psicologica, calculada por la OMS en mas del 75% de las personas que lo necesitan, sino ademas en la casi ausente de la prevencion y fomento de la salud mental, con la existencia de intervenciones reduccionistas, farmacologicas y hospitalarias, que absorben mas del 85% del presupuesto total de la raquitica inversion que los gobiernos destinan a este rubro de salud. 

La psiquiatria en México sigue prevaleciendo en su ejercicio con pocos psiquiatras, que ademas de mal distribuidos en el territorio nacional estas concentrados en las mayores zonas urbana metropolitanas, como en la ciudad  de México, Guadalajara y Nuevo León, casí inexestientes en zonas rurales y con mayor ocupacion laboral en la seguridad social, IMSS, ISSSTE y la SSA, donde cronicamente escazean las plazas para aspirantes de esta especialidad, con un ejercicio limitado a las actividades de consultorio en las clinicas y hospitales, congestionados en las necesidades de los pacientes, donde los tiempos limitados impiden ejercer una adecuada relacion médico-paciente, generalmente 15 minutos a los pacientes subsecuentes y si acaso 30 minutos a los pacientes de primera vez, imposibilitados de ejercer técnicas de psicoterapia y hasta de seguir adecuadamente la vigilancia clinica farmacologica en sus pacientes, dandose el caso oridnario de tener que realizar prescripciones de medicamentos, hasta por periodos de seis meses a un año, que obliga al médico familiar en su funcion de vigilancia y provedor de los farmacos prescritos, sólo recurriendo a la referencia con el psiquiatra, si existe alguna complicacion en el curso de evolucion de los pacientes. Lejos estamos de brindar la atencion con un modelo integral que involucre las acciones de intervenciones psicoterapeuticas y psicosociales fundamentales para lograr la rehabiliatcion de los pacientes. Luego las intervenciones hospitalarias, en las unidades de atencion de urgencias, escacean los psiquiatras, son mayormente requeridos en el caso de intentos suicidas y crisis psicoticas agudas, con deficientes mecanismos de referencia para el seguimiento de estos casos, dandose aberraciones como el de los pacientes suicidas que no son adecuadamente atendidios y logran su proposito al ser dados de alta despues de un intento. 
En tanto los pacientes psiquiátricos  que son internados en unidades hospitalarias, siguen padeciendo las transgresiones a sus derechos fundamentales, con las deficientes informaciones y consentimientos que a derecho le corresponden, algunos sometidos violentamente, aislados, marginados y excluidos de su vida familiar  y comunitaria, muy lejos de las propuestas de los modelos de intervencion de las modernas comunidades terapeuticas, que emergieron para sustituir los nefastos modelos manicomiales y carcelarios que prevalecian el siglo pasado. Ni que decir de los pacientes psiquiatricos internados en los denominados centros pemintenciarios, sujetos a procesos de asilamientos y sometimientos a terapias mayormente farmacologicas, sin ninguna posibilidad de integracion de otras terapias de rehabiliatcion psicosocial; mas critico es el estado que guardan los centros de internados para niños y adolescentes infractores que cursando con necesidades de atención a su salud mental no se les otorga el derecho a la atención psiquiatrica que requieren en su proceso de reahbilitación psicosocial. 

Muy lejos estamos de lograr la integracion de una red nacional de centros de atención a la salud mental donde equipos interdisciplinarios constituidos minimamente por un psiquiatra, psicologo, trabajador social y enfermera, desarrollen el modelo de atencion primaria que ademas de lograr los procesos de atencion a las enfermedades mentales, haga las fundamentales acciones de prevencion y fomento de la salud necesarias para disminuir la alta prevalencia de los trastornos que siguen incrementandose en nuestro pais de forma alarmante.

Además de incrementar los psiquiatras, necesitamos lograr modelos academicos de formacion actualizados que superen la prevaleciente inmersion hospitalaria e integren la psiquiatria comunitaria acorde a nuestras realidades nacionales y regionales de México.







  


sábado, 3 de diciembre de 2016

CUBA y FIDEL CASTRO EN MI EXISTENCIA

Como la mayoría de los jóvenes opositores al régimen de oprobio que nos ha gobernado en México, de la generación nacida en la década de los cincuentas del siglo pasado, crecí y me desarrolle bajo la influencia del movimiento revolucionario que en Cuba terminó, con uno de los regímenes dictatoriales que agobiaban a nuestra América y el Caribe, derrocando a la familia batista y sus testaferros, con sus aliados del imperio estadounidense, que había contribuido al mantenimiento de la injusticia, explotación y autoritarismo militar criminal que estilaban en todos sus colonizaciones del mundo.

Ser joven y no identificarse con los jóvenes revolucionarios como el Che Guevara y  Fidel Castro, resultaba contradictorio en la formación de nuestras identidades políticas militantes opositoras a las oligarquías y gobernantes de nuestro país, mas en nuestros estados donde bregábamos en las diferentes trincheras de los movimientos y organizaciones sociales, cuando el trabajo político partidista de izquierda socialista o comunista, sólo era posible en la clandestinidad, protegiéndonos de la represión infame del régimen priísta, que padecimos en ese periodo obscuro de su guerra sucia contra los opositores en México.

El triunfo de los revolucionarios cubanos nos catapulto la fortaleza de nuestra motivación, nuestra conciencia e identidad política de izquierda y no sólo nos ejemplifico que nuestra utopías eran posibles, nos ofreció además un espacio para vivenciar los cambios revolucionarios en la construcción de una sociedad socialista, en un territorio concreto y cercano de México, con su eje dimensional del hombre nuevo, con el imperativo ético, libertario, democrático, solidario y justo, en una sociedad sin clases sociales dominantes y explotadoras que la filosofía marxista-leninista nos proponía en sus contenidos teóricos.

Algunos compañeros y compañeras se integraron a las tácticas y estrategias de la guerra de guerrillas, contra el régimen dictatorial del priísmo gobernante, tratando de lograr los mismos objetivos que los revolucionarios cubanos, con una respuesta represora feroz del régimen, que asesino, encarcelo y desapareció a miles de compañeros; otros optamos por integrarnos a la estrategia no violenta, que significaba bregar en las luchas de los movimientos, organizaciones y partidos políticos opositores, que tuvo su primer momento cumbre en el año 1988, cuando el Frente Democrático Nacional gano las elecciones nacionales con Cuauhtémoc Cárdenas a la presidencia, arrebatándonos el triunfo con una gran fraude, que incluyeron sus estrategias electorales mas ruines desde la compra del voto, la coacción a los votantes, el robo de urnas, el relleno de votos, la falsificación de actas y el fraude cibernético, que incorporaban con el uso de las nuevas tecnologías de la informática, el priísmo y sus testaferros lograron posesionar como presidente de México, al personaje ignominioso de Carlos Salinas de Gortari, quien integró sus políticas a los intereses del neoliberalismo fortaleciendo la globalización del capitalismo deshumanizante, que no hemos logrado desterrar de nuestra patria.  Fue en ese contexto que inicie mi participación en las luchas político-electorales, por mis antecedentes activistas, me buscaron ex compañeros militantes de izquierda y lograron mi integración al Frente Popular Tierra y Libertad, para iniciar a su vez la construcción de una organización partidista nacional que sería el Partido del Trabajo, eran los tiempos en que se iniciaba el colapso de la Unión Soviética que finalizó en 1991, con la desaparición de esa unión que constituía la nación mas ejemplificante de la construcción del socialismo en el mundo occidental.

Fue en ese año que por primera vez visite a Cuba, en calidad de integrante activista de esas organizaciones, en un viaje oficial donde conjuntamente con otros compañeros, fuimos a solidarizarnos con el pueblo cubano, siendo atendidos por compañeros dirigentes del Partido Comunista Cubano y los Comités de Defensa de la Revolución, que nos llevó a convivir con su pueblo, con sus familias, en sus barrios en diferentes territorios de la Habana, quienes compartieron sus experiencias y vivencias en el proceso revolucionario, que vivieron y vivían por las limitaciones impuestas, en este periodo especial donde al infame y criminal bloqueo impuesto por los Estados Unidos, se sumaba el alejamiento del apoyo de las políticas económicas y de asistencia de la Unión Soviética, llegando a los extremos de escasear medicamentos, racionar los alimentos y los energéticos como la electricidad, el petróleo y las gasolinas; eran situaciones que no lograban menoscabar la fortaleza política, menos el estado de ánimo con el que nos enaltecían, en sus relaciones con el amor fraternal y la bondad de los compañeros cubanos que nos daban; además no dejaban de expresarnos, el inmenso reconocimiento y gratitud hacia nuestra patria por la solidaridad que siempre les hemos proporcionado, desde que se inicio su revolución a la fecha. Fueron los tiempos que empezó a prevalecer el denominado turismo sexual, donde con el afán de  ganarse algunos beneficios, algunos cubanas y cubanos, se desempeñaban como acompañantes de los extranjeros, compartiendo su belleza y su sexualidad en los centros de diversión y entretenimiento a los que habitualmente no tenían acceso. 

Luego en 1993 fui invitado, en el marco de mis tareas de planeación y desarrollo de la Prepa Emiliano Zapata, que les brindaba a los compañeros del FPTYL, a conocer sus experiencias en la educación del nivel medio superior, que me permitieron conocer con amplitud y profundidad los grandes cambios generado en todos los niveles educativos por las políticas prioritarias de inversión de sus gobernantes, que mantenían en sus instituciones desde la educación inicial hasta la universitaria con sus postgrados. En sus instituciones predominaba una gran austeridad en sus inmuebles, equipos e insumos para la enseñanza, que contrastaba con sus riquezas ideológicas, motivacionales y existenciales, que les generaba una excepcional mística de servicio, no sólo a los maestros sino también a sus educandos, haciéndolos brillar en sus inteligencias, destacando desde entonces en los escenarios competitivos internacionales. Los alumnos  jóvenes de la prepa, destacaban además por sus conocimientos sobre política, economía, historia y sobre las diferentes artes y culturas del mundo, en el contexto del origen heleno centrista y desde luego, el análisis desde los paradigmas de la filosofía marxista leninista. Curiosamente la figura de Fidel Castro se ausentaba en todos los espacios que ordinariamente debería uno de esperar, como aulas, salas, oficinas, calles, avenidas, en tanto el culto a su persona, estaba presente en la mayoría de los cubanos y cubanas, siempre magnificada como figura paternal y su máximo líder revolucionario. Invitado a una recepción oficial en una de las residencias del gobierno cubano, me presentaron a Roberto Robaina, entonces ministro de relaciones exteriores, donde estaban además una gran cantidad de compañeros de los países de Europa, incluyendo de la ex Unión Soviética, todos esperábamos a Fidel Castro, cuya aparición desbordo nuestras emociones, sobre todo a los lideres de los países ex-socialistas, quienes entonaron el himno de la internacional socialista, con tal emotividad, que algunos desbordaron en llanto, ahí estaba Fidel, imponente, sonriente dispuesto a interaccionar, expresándonos su saludo solidario, sin sus abundancias discursivas, sólo ahí, conviviendo y enalteciéndonos con su presencia, orgulloso de haber tenido esta vivencia por primera vez en mi vida. 

Después en 1994 y1995, acudí nuevamente en el desempeño de tareas políticas del FPTYL, en el marco de la organización del Frente Continental de Organizaciones Comunales, donde los tiempos transcurrieron en reuniones, donde se dialogaba y se buscaban consenso con todos los representantes de los países, sobre las estrategias y acciones para el crecimiento y fortalecimiento de este organismo, no sólo en Latinoamérica sino en el Caribe. Fue hasta 1997 que necesitado de un gran descanso, acudí sin ningún objetivo político, sólo para turistear, en lo que fue uno de mis viajes mas placenteros en el extranjero, acompañado por cuatro amigos uno de ellos fue el actor mexicano don Jesús González "Chis Chas", comediante (QEPD), desde que abordamos el avión, no dejaba de estimular nuestra alegría, por sus chistes, ocurrencias y anécdotas,   todos disfrutamos los tiempos en la Habana y Varadero, con sus atractivos turísticos y desde luego las grandes atenciones del pueblo cubano, tuve oportunidad hasta de sumergirme en sus rituales santeros, donde me quedé con la anécdota de que años después, sólo sobrevivimos dos de los compañeros, que vivenciamos uno de sus ritos de limpieza contra la maldad, los otros dos, que no lo hicieron, han muerto.  Un año después en 1998, acudí con los compañeros regidores  de la comisión de salud del H. Ayuntamiento de Monterrey, con el objetivo de que conocieran el sistema de salud cubano, las autoridades cubanas nos integraron una amplia agenda que nos permitió constatar sus grandes avances en el funcionamiento de sus instituciones de atención clínica, hospitalaria, investigación y académicas a pesar de las carencias que seguían por el periodo especial en que transitaban, aun así el gobierno se distinguía por ser uno de los países que mayor inversión de su producto interno bruto destinaba, llegando a ser hasta del 10%, en el mundo, destacando de conformidad con la OMS por su reconocimiento a su sistema nacional de salud como uno de los mas grandes en cobertura universal a toda la población, con un modelo de atención integral con calidad, que enfatizaba en la prevención y que ha logrado las tasas mas bajas de mortalidad en los niños y mujeres con una expectativa de vida de las mas altas en América.

Finalmente tuve la máxima experiencia de convivencia en tiempo, con la presencia de Fidel Castro, asistí al Encuentro Internacional de Economistas con el tema central de globalización y problemas del desarrollo, celebrada en el Palacio de las Convenciones  de la Habana, del 18 al 22 de enero del 1999, fueron cinco días con sus largas jornadas que iniciaban a las nueve de la mañana y llegaban a terminar  hasta altas horas de la medianoche. Fidel estuvo permanente en el presídium, el día de su discurso inaugural vivenciamos sus grandes dotes de orador con su lenguaje docto, fortalecido por sus facies gestuales, posturas corporales, el control emocional y una memoria reciente y remota extraordinaria, que nos hacía sorprendernos y embelesarnos sin importarnos la duración de sus discursos, que le caracterizaban por sus excesos, de uso del tiempo. Luego ya en el desarrollo de las exposiciones orales de los economistas expertos, estaba atento, algunas veces con cortesía, interrumpiendo al expositor, cuestionando, aclarando, ampliando, dándole ese toque magistral a este evento académico que reunía a los mas altos economistas de la izquierda socialista de los países de nuestro mundo. En los recesos ahí a unos pasos, de nosotros, siempre estaba Fidel Castro con su uniforme militar verde oliva, algunas veces parado, otras sentado, afable, bondadoso, conversando, de buen humor, atento, transpirando ese amor fraternal que irradiaba, muy lejos de esos estereotipos  de los enemigos que le calumniaban como un personaje militar dictador sanguinario. En ocasiones, durante el evento, nos engañaba su visible cansancio, parecía que dormitaba, con el demerito de su atención, algunos ponentes se sorprendían, al ser interrumpidos por Fidel, por sus grandes cualidades cognoscitivas, ese hombre que al parecer dormitaba, les corregía en sus errores al discursar sus ponencias, con un sentido del humor saludable, inofensivo, que nos sorprendía a todos. Cansados, casi exhaustos, los cientos de asistentes a este evento,  en la última hora del quinto día, en el que finalizaba la intervención de los expositores, resulta que ya era la medianoche, se concluyo la última intervención, quedando sólo el acto final de clausura con el discurso del comandante Fidel Castro, proliferaron los rumores de que terminaríamos en la madrugada, a la expectativa de sus largas intervenciones, entonces Fidel,  haciendo gala de su humor, ironiza y nos dice "ya se que estamos muy cansados, por lo tanto seré breve", reímos con él y entonces escuchamos su discurso mas breve, que además de durar unos minutos fue muy sabio, al sintetizar con una frase el estado de los economistas en el mundo: "Los economistas y sus modelos imperantes en el mundo hasta hoy, nos han mostrado que no saben sumar, menos multiplicar, sólo dividir y restar, tenemos un gran reto", váyanse a descansar, concluyó.

La Cuba que yo he vivido, es una patria donde su pueblo es libertario, goza sus libertades con el respeto a sus derechos humanos y sociales, a pesar del bloqueo económico y político de Estados Unidos, con sus ciudadanos inmersos en la alegría, felices, con un modelo democrático participativo, donde los principios y valores les enaltece su humanismo, que les ha distinguido con sus altos niveles de desarrollo humano y social en el mundo, pero sobre todo por su solidaridad con los pueblos en la lucha digna internacionalista contra todas las formas de imperialismo y su salvaje sistema capitalista. 

Fidel, no ha muerto, ha renacido para seguir iluminando la esperanza de los pueblos en sus luchas contra la explotación, la injusticia y las desigualdades con sus lacras de miserias y pobreza.