La compañera Myriam Morales Bermudez, a nombre del equipo de trabajo de profesionales de la salud mental que laboramos en el Centro de Salud Mental de la SSA en Nuevo León, logró presentar un trabajo de investigación denominado PERFIL PSIQUIÁTRICO DE
USUARIOS EN UN CENTRO DE SALUD MENTAL EN MÉXICO en el XVI Congreso Mundial de Psiquiatria, celebrado en Madrid del 14 al 18 de septiembre, del año en curso, que describe el prefil de usuarios de este tipo de unidades y que compartimos en este blog para su conocimiento.
Los autores (Aguilar C. Ricardo, Zapata C. Ricardo y Morales B. Myriam), somos parte del equipo de trabajo de
profesionistas de la salud mental de un Centro de Salud Mental, de la
Secretaría de Salud de nuestro estado, que gestionamos ante las autoridades y
con su valioso apoyo iniciamos sus funciones en el mes de octubre del año 2003.
Este centro está localizado en la zona norte de la ciudad de Monterrey, Nuevo
León en una zona suburbana conocida popularmente como Topo Chico, en la Colonia
Tierra y Libertad, una zona de alta prevalencia de problemas psicosociales
inmersos en diferentes grados de marginación, pobreza y violencia. Esta investigación la iniciamos
en el 2011 y el procesamiento y análisis de la información la finalizamos a
principios del 2013, logrando concluir un estudio retrospectivo, transversal y
descriptivo que permitió cuantificar las
principales variables de los expedientes
clínicos existentes en los archivos desde que se iniciaron las actividades en
el año 2003, hasta el mes de agosto del 2011 y cuyos resultados a continuación
referimos.
En ese periodo se integraron 5813 expedientes clínicos,
que contienen las historias clínicas psicológicas, psiquiátricas, una cedula de
ingreso al servicio y las notas de evolución correspondientes, además del
estudio de sus familias con la detección de las variables socioeconómicas y
demográficas. Los resultados sintetizados se expresan a continuación.
El 55% de los usuarios correspondían a mujeres y el 45% a hombres, lo cual se correlaciona con
las tendencias mundiales existentes de usuarios femeninos de servicios de salud
mental en este tipo de unidades a nivel de usuarios de servicios psicológicos y
psiquiátricos públicos y privados.
El 47% de las personas atendidas pertenecen al grupo de
edad de 6 a 19 años, luego le siguen con
el 43% personas del grupo de edad de los 20 a los 49 años y el restante 10% comprenden
personas de 50 años y más. El 58% pertenecen
al estado civil de solteros, el 29% son casados, el 5% están en unión libre y
otro 5% son separados y divorciados, en tanto sólo el 2% son viudos, lo cual se
correlaciona con los grupos de edades que prevalecen como mayoría de usuarios
de nuestros servicios y con el dato prevaleciente de que en general son las
personas solteras y en estados de riesgo por las perdidas relacionales
afectivas quienes mayormente presentan necesidades de atención en el marco de
problemas emocionales y conductuales.
El 47% están integradas en familias extensas,
generalmente de los padres, en una sola vivienda donde comparten los servicios,
sólo el 41% viven en familias del tipo nuclear tradicional y el 12% restante
son familias monoparentales o viven solos.
Este grupo de pacientes en su mayoría, un 41% están
ocupados como estudiantes, la mayoría en la enseñanza básica de primaria y
secundaria, luego el 29% se dedican a su
hogar, desarrollando las labores domésticas y de crianza de la familia; el 23%
son activos laboralmente como empleados o trabajadores independientes, mayormente,
en servicios domésticos, de la construcción y obreros; el 6% estaban
desempleados al momento de la consulta y la mayoría se desempeñaba en trabajos
temporales, y sólo el 1% estaban en
calidad de jubilados y pensionados.
En lo que corresponde a la escolaridad de este grupo de
pacientes resulta que el 7% es analfabeto, el 42% estaba cursando en la
educación básica del nivel primaria, el 30% en el nivel de secundaria, el 8% de
preparatoria, un 5% en educación técnica y otro 5% con algún nivel de grado en
educación universitaria.
En el marco de cobertura de servicios de salud de que
disponían sus familias, hasta el 29 de agosto del 2011, el 93% los usuarios no tenían servicios de seguridad
social, sólo el 7% tenían cobertura de alguna de las instituciones prestadoras
de este servicio, como el IMSS, ISSSTE, ISSTELEON y servicios médicos municipales; el acceso a
servicios médicos de esta población no derechohabiente se limitaba a los
servicios de salud públicos estatales y municipales, en unidades hospitalarias
y clínicas como la nuestra. Las políticas de ampliación de cobertura de las
autoridades de salud, con el denominado seguro popular, han modificado esta
cobertura después de la fecha referida, hoy la mayoría de estos usuarios
corresponden a ese seguro popular, cuyos usuarios no tienen que pagar cuotas de
recuperación para ser consultados y reciben medicamentos gratuitos en el marco
de un cuadro básico de psicofármacos de los que disponemos en la SSA para
desarrollar el proceso de atención psiquiátrica.
El 35% era referido para su atención a solicitud los
padres, la esposa, el esposo u otro miembro de la familia, por algún problema
en su salud mental, en su vida escolar, la mayoría por alteraciones
emocionales, comportamientos conflictivos, transgresiones reiteradas a la disciplina,
problemas de aprendizaje, en el marco de las interacciones familiares, con sus
hermanos o sus padres; luego el 27% era referido por los médicos generales con
algún diagnóstico presuntivo de enfermedad mental, el 18% acudió
voluntariamente motivado en el marco de algún problema o dificultad que ellos
percibían en sus emociones, conductas, interacciones o en relación al sueño, sólo
un porcentaje muy pequeño, el 1% fue referido por autoridades de procuración de
justicia en apoyo a sus procesos de rehabilitación, generalmente asociados con
drogas.
El problema de salud mental que fue motivo de
intervención en la primera consulta psiquiátrica quedó representada con el 31% por trastornos de conducta que
alteraban las relaciones familiares, sociales, laborales, sociales y escolares
del paciente, luego seguían con un 28% la presencia de algún síntoma depresivo,
un 11% que acudía por síntomas de ansiedad y alteraciones somáticas, un 7% por
consumo de alguna de las substancias toxicas, el 4% con síntomas psicóticos, el
2% con trastornos alimentarios y otro 2% con algún trastorno del sueño. En el
15% de estos pacientes se detectó además
que eran víctimas de algún tipo de violencia, donde de acuerdo al programa de
violencia familiar en el 53% era
psicológica, el 5% sexual, el 5% física, el 35% era mixta y el resto
patrimonial.
Luego en el marco de los diagnósticos que se
establecieron en la consulta psiquiátrica de conformidad con el ICD-10 (1), fue detectado en primer lugar con
un 32% de prevalencia los correspondientes a el grupo de los Trastornos del
Humor, afectivos (F 30-39), destacando los Episodios depresivos (F32), el
Trastorno depresivo recurrente (F33) y el Trastorno Bipolar (F31). En segundo
lugar con un 28% de prevalencia para los denominados trastornos del
comportamiento y de las emociones de comienzo habitual en la infancia y la
adolescencia (F90-F98) principalmente eran trastornos hipercinéticos (F90),
trastornos disóciales (F91) y trastornos de las emociones (F93 y F98)
destacando la enuresis, encopresis, estereotipias, pica y los trastornos de
conducta alimentaria, que alteraban las relaciones familiares, sociales,
laborales o escolares del paciente.
En tercer lugar, con el 13% prevalecían los diagnósticos
relacionados con los Trastornos neuróticos, secundarios a situaciones
estresantes y somatomorfos (F40-F49), destacando en primer término los
Trastornos de Ansiedad (F41), Los trastornos de Ansiedad Fóbica (F40), los
Trastornos debidos a Reacciones a estrés grave y trastornos de adaptación (F43),
el Trastorno Obsesivo Compulsivo (F42), Los Trastornos disociativos (F44) y los
trastornos somatomorfos (F45). En
cuarto lugar con el 9% se ubicó la Violencia familiar (Y07)
como único objetivo de intervención en sus diferentes manifestaciones donde la
persona presentaba alteraciones emocionales y conductuales, sin configurar un
cuadro clínico psicopatológico en el momento de la evaluación en la primera
consulta, por lo que era integrada a su atención al programa de atención de
Violencia familiar.
En quinto lugar
con
un 6% de prevalencia, del total de las consultas referidas para nuestra
intervención en este periodo, se ubicaron los diagnósticos correspondientes al
grupo de trastornos de Esquizofrenia (F20-29), predominando la Esquizofrenia
(F20), luego el Trastorno Esquizotipico
(F21), el Trastorno de ideas delirantes (F22), Trastorno Esquizoafectivo (F25)
y los Trastornos Psicóticos (F28). Luego en el sexto lugar, con este mismo
porcentaje, el 5% de prevalencia, fueron
por el grupo de Trastornos de Personalidad y del comportamiento del
adulto (F60-F69) en sus diferentes tipos, predominando el Trastorno histriónico
(F60.4), luego el trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad
(F60.3), el Trastorno disocial de la personalidad (F60.2), el trastorno ansioso
(F60.6).
En séptimo lugar se ubicaron los diagnósticos
correspondientes al grupo de Trastornos mentales y del comportamiento debido al
consumo de sustancias psicotropas (F10-F19) con un 5%, destacando los
trastornos mentales y del comportamiento debidos al abuso en el consumo de
alcohol (F10), los trastornos mentales y del comportamiento debido al consumo
múltiple de drogas (F19), donde destacaba la asociación de consumo de
marihuana, alcohol y el uso de disolventes o cocaína, luego destacaba el uso
sólo de cannabinoides (F12), finalizando
con los trastornos mentales y del comportamiento debidos al consumo de
disolventes volátiles (F18).
En octavo lugar con casi el 3% fueron diagnosticados
los denominados Trastornos del desarrollo psicológico (F80-F89), donde
desatacan los Trastornos específicos del desarrollo del aprendizaje escolar
(F81), seguido por los Trastornos específicos del desarrollo psicomotor (F82),
luego los denominados Trastornos generalizados del desarrollo (F84), como el
autismo, el síndrome de Rett y el de
Asperger. En noveno lugar con el 1.7% de prevalencia, se encontraron los
diagnósticos correspondientes al grupo de Trastornos mentales orgánicos
(F00-F09), destacando las demencias (F00- F01), los Trastornos mentales debidos
a lesión o disfunción cerebral o a enfermedad somática (F06) los trastornos de personalidad, del
comportamiento debidos a lesión o disfunción cerebral y los trastornos de la
personalidad y del comportamiento debidos a enfermedad, lesión o disfunción
cerebral (F07).
En noveno lugar con el 1.3%, de prevalencia se
encontró el grupo que corresponde al Retraso mental (F70-F79) que consultaban
por los problemas de conducta y trastornos emocionales generalmente disruptivos
provocando conflictos familiares y sociales y afectando su calidad de vida.
Finalmente, en el décimo lugar, una pequeña proporción de pacientes que
correspondía al .5% de prevalencia en la consulta, presentaba el diagnostico de
algún Trastorno del comportamiento asociados a disfunciones fisiológicas y a
factores somáticos (F50-F59), donde se integran los trastornos de la conducta
alimentaria (F50), como la Bulimia y la Anorexia, los Trastornos no
orgánicos del sueño (F51),
principalmente el insomnio; y finalmente las Disfunciones sexuales no orgánicas
(F52), como la disfunción orgásmica (52.3), Fracaso de la respuesta genital (F52.2) y la
Eyaculación precoz (F52.4).
Conclusiones:
Este estudio muestra el perfil de usuarios y la
prevalencia de los trastornos mentales en una muestra representativa de la
población mexicana que acude a e este CECOSAM, y se correlaciona con otros
estudios de prevalencia en México (2), en Panamá (3), Costa Rica (4), Chile (5)
y España (6, 7, 8, 9), coadyuvando a la planeación adecuada para el desarrollo
de servicios comunitarios de salud mental en los países de America Latina y el
Caribe (10, 11) y además en las necesidades programáticas de la capacitación
técnica y profesional de los recursos humanos para la atención a la salud
mental.
Bibliografía
1. Clasificación Estadística Internacional de
Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud. (CIE-10). 2010 OPS-OMS
2. WHO-AIMS, Informe de la evaluación del sistema de
salud mental en México
Organización Panamericana de la Salud. MÉXICO 2011.
3. IESM-OMS Iinforme sobre el sistema de salud mental
en Panamá 2006 disponible en
http://www.who.int/mental_health/panama_who_aims_report_es.pdf
4. IESM-OMS. Informe de la Evaluación del Sistema de Salud Mental en Costa
Rica utilizando el Instrumento de Evaluación para Sistemas de Salud Mental de
la OMS COSTA RICA. 2008 disponible en:
http://www.who.int/mental_health/costarica_who_aims_report_es.pdf
5. WHO-AIMS. Informe de la evaluación del sistema de
salud mental en Chile
2006. Santiago, Chile. Disponible en:
http://www.who.int/mental_health/chile_who_aims_report_es.pdf
6. Gili, M., Roca, et, al. (2012). The
mental health risks of economic crisis in Spain: evidence from primary care
centres, 2006 and 2010. The European Journal of Public Health, en internet:
7. Josep M Haro, et al. Prevalencia de los trastornos
mentales y factores asociados: resultados del estudio ESEMeD-España, en
Internet: http://zl.elsevier.es/es/revista/medicina-clinica-2/prevalencia-los-trastornos-mentales-factores-asociados-resultados-13086324-originales-2006
9. EL CORREO GALLEGO. 2006 Nov. Servizo Galego de Saúde (Sergas).
Aumentan casi un 17 por ciento las consultas de los gallegos al psiquiatra. Disponible
en: http://www.elcorreogallego.es/index.php?idMenu=39&idNoticia=101187
10. WHO-AIMS.
Regional Report on Mental Health Systems in Latin America and the Caribbean. Ed.
Organización Panamericana de la Salud, 2013.
VERANO
DEL 2104