miércoles, 2 de diciembre de 2009

LA IZQUIERDA MEXICANA Y LA ETICA POLITICA

Mañana 3 de diciembre inicia el XIII Congreso Nacional del PRD (Partido de la Revolución Democrática) que tiene por objetivo lograr cambios trascendentes para el futuro de la izquierda en México y que, según sus dirigentes, será el marco de inicio para la “Refundación” de este organismo político y de la izquierda mexicana.

La izquierda mexicana decidió integrarse a la lucha por el poder mediante la vía electoral a principios de los setentas en el siglo pasado, en el marco de la reforma política del gobierno, reforma que integraba el régimen de partidos políticos en nuestro país y que para nosotros representaba un falsa estrategia manipuladora del gobierno en el poder, que sin embargo logro ilusionar a algunos compañeros progresistas que luchábamos por la democratización de nuestra sociedad en el marco del régimen autoritario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) el cual gobernaba con una gran capacidad de represión a través de sus instituciones, que instrumentaba a todos aquellos que nos manifestábamos contra sus estilos de gobierno donde prevalecía el autoritarismo, la injusticia, la desigualdad y la lacerante pobreza de la mayoría de nuestro pueblo.

Para algunos compañeros, este régimen de partidos con partido hegemónico, represento un marco perfecto para aliarse con el poder y cohabitar como intelectuales al servicio de la lucha democrática simulada con el partido en el poder; se trataba según ellos de luchar desde adentro, fundamentados en los fracasos continuos que habíamos estado teniendo en las diferentes luchas sociales, se integraban así sólo por la coyuntura a formar parte de la gente progresista o de izquierda en el partido hegemónico y o sus partidos satélites que existían, mejoraban económicamente y se anquilosaban como activistas por la lucha democrática.

Esta capacidad de incorporar disidentes, reprimir a los opositores, eliminar opciones plurales diferentes sumadas al debilitamiento de los partidos políticos emergentes de oposición fue lo que detuvo por varias décadas el desarrollo de un verdadero régimen de partidos en México. Nuestro espacio de participación política, a finales de los sesentas, fue limitado a actividades clandestinas, por la ilegalidad y la represión que con saña se realizaba sobre el Partido Comunista Mexicano (PCM), y otras organizaciones políticas de izquierda, en el marco de la encarnecida lucha prejuiciosa contra las ideas comunistas, ahí en el PCM se desarrollaría nuestra primera experiencia en el seno de un partido político mexicano, donde quienes integrábamos las bases sólo teníamos una función militante en el ámbito de nuestra formación política a través de sus células; el ejercicio democrático se limitaba a la participación deliberativa en torno a los problemas políticos coyunturales de nuestro estado y las decisiones eran funciones centralizadas por los dirigentes quienes argumentaban fundamentalismos ideológicos impregnados de férreas disciplinas, justificadas en la seguridad de la organización y los lideres, por el acecho permanente del gobierno; las tareas y decisiones políticas no se debían cuestionar, se asumían, imperaba la férrea disciplina partidista. La percepción autoritaria, el centralismo y el abuso en la imposición de líneas de trabajo político, sin consensos nos desmotivaron a seguir en el trabajo político en este partido.

En esos tiempos el Partido Popular Socialista (PPS) y el Partido Autentico de La Revolución Mexicana (PARM) representaban a la oposición simuladora de organizaciones progresistas, socialistas o liberales, que generalmente hacían sus acuerdos cupulares con el gobierno en turno, limitando su quehacer político partidista sin trascender en la lucha por la democracia de nuestro país, en el medio político eran conocidos como partidos satélites del partido hegemónico gobernante o paraestatales por su dependencia económica y política del gobierno y el partido gobernante; sus invitaciones a incorporarnos a militar para el quehacer partidista ni siquiera las considerábamos porque carecían de sentido en el marco de nuestra lucha por la democracia y la libertad de nuestro pueblo.

Los acontecimientos históricos del 2 de octubre de 1968 y luego los del 10 de junio de 1971 llevaron al régimen gobernante a tratar de legitimarse abriendo los espacios políticos a la izquierda y facilitando su integración legal a los partidos a través de una reforma política que fue impulsada por Jesús Reyes Heroles en 1977 . El PCM y el Partido Socialista de los Trabajadores (PST), obtendrían su registro en 1978, el Partido Social Demócrata (PSD), el Partido Socialista Unificado de México (PSUM) y el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) en 1981 y el Partido mexicano de los Trabajadores (PMT) en 1984, en estos partidos de izquierda existía la posibilidad de incorporarse al trabajo político partidista, posibilidad que fue desmotivada por la inexistencia de condiciones democráticas en su interior y la prevalencia de fundamentalismos y dogmas ideológicos que sustentaban un incipiente centralismo democrático generador de poderes fácticos productores de autocracias y oligarquías dirigentes que en algunos casos cedían a las tentaciones de cooptación con el gobierno en turno para lograr mantener prebendas y posiciones electorales en el contexto de las políticas de eliminación de la oposición del estado mexicano.

Luego, en el marco de la Reforma Electoral de 1986 y el desarrollo del movimiento democratizador generado por la unificación de organizaciones sociales, sindicales, campesinas, académicos, intelectuales y diferentes partidos políticos de oposición al régimen (como el PMT, PFCRN ex – PST, el PPS, PARM) nos motivo para participar en la lucha con el Frente Democrático Nacional (FDN) donde por primera vez toda la izquierda política nacional y las fuerzas progresistas nos uníamos para lograr el poder que permitiera la necesaria transformación democrática de nuestro país. La perversión de las oligarquías políticas y financieras que gobernaban el país, usando nuevamente sus métodos represivos y de eliminación logró el histórico fraude electoral en 1988. La vía electoral, como estrategia de lucha para acceder al poder, nuevamente nos desmotivaba en el trabajo político en el marco del régimen de partidos.

La mayor parte de los integrantes de los partidos y organizaciones sociales de este FDN fue lo que dio origen al Partido de la Revolución Democrática en su Asamblea Nacional Constitutiva del partido que celebro los días 5, 6 y 7 de mayo de 1989, aunque fue hasta el 26 de mayo de 1989 que obtuvo su registro como partido político nacional; desde entonces, en sus 20 años de existencia los principios y valores esenciales de la democracia y de la ética política se fueron extinguiendo a la medida que llegaron en abundancia los recursos económicos en el marco del financiamiento público hacía los partidos; el empoderamiento electoral, los cargos públicos y las estrategias de cooptación del gobierno en turno. La humildad económica y política de algunos activistas y dirigentes que les distinguía en su obsesiva lucha ideológica contra la “Burguesía” terminó siendo envilecida ideológicamente por el disfrute de placeres que caracterizaban el encanto, no tan discreto, de su otrora enemigo de clase. Las perversiones y desviaciones del quehacer político partidista con sus lacras de cultura antidemocrática, la violación sistemática de los derechos fundamentales de sus militantes y la transgresión impune de la legalidad poco a poco fueron extendiéndose como un cáncer incurable, su estatuto donde están integradas los valores y principios de la democracia, la libertad y la justicia sólo servían como instrumentos virtuales para lograr el ejercicio del poder cupular convirtiéndose de facto en una oligarquía integrada por lideres de corrientes que centraliza la democracia en el marco dogmático y sectario de su corriente ideológica. Trascendía el dicho de que el "acuerdo entre corrientes mata estatuto", así se convertía el camino más fácil, dando paso al pragmatismo, para lograr los beneficios materiales y económicos inherentes de las jugosas prebendas, las seductoras posiciones plurinominales de los puestos electorales que permiten saltar de puesto en puesto y los puestos públicos en la instituciones donde el partido llegaba a ser gobierno. Los militantes y dirigentes de las corrientes lograban un buen nivel de vida al integrarse a la cómoda perversión de la política clientelar, patrimonialista y autoritaria que transcurre en la forma más aberrante de la democracia al interior de los partidos llegando a pelear sin principios éticos las posiciones de regidores, diputados y senadores e integrantes de los órganos de dirección, deciden los manejos financieros discrecionalmente y son quienes seleccionan los candidatos con una excelente legitimación simulada de supuestos procesos democráticos.

Los lideres morales de nuestro partido como Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador y muchos de quienes mantenemos la integridad y congruencia en la política de izquierda hemos coincidido en la necesidad de acabar con el clientelismo, el pragmatismo, el oportunismo, el corporativismo y el burocratismo que prevalecen obstaculizando gravemente el desarrollo institucional del PRD y atándolo a los pequeños y mezquinos intereses de lideres y militantes de las denominadas corrientes políticas que no funcionan como tal sino como grupos de interés tribales donde se ausenta no sólo la discusión ideologica que pregonan sino la ética política.

Mi militancia en el PRD es un intento de mantener la congruencia con el trabajo político desde la izquierda y porque es el único partido donde se conceptualiza la democracia como un “estilo de vida” a lograr en la transformación de la sociedad y en su funcionamiento interno como partido, sin embargo a pesar de que su estatuto privilegia normas, principios y valores sobre la libertad y la democracia en su interior; que por cierto es uno de los estatutos de partidos políticos que tienen mejor contenido para desarrollar la cultura democrática al interior de los partidos en estos ocho años hemos vivenciado los comportamientos antidemocráticos donde prevalecen esas practicas centralistas, clientelares y sectarias en el proceso de selección de sus dirigentes internos y candidatos a puestos de elección popular, en los mecanismos de solución de conflictos de los militantes con tímidos intentos de privilegiar consensos, en el funcionamiento colegiado de sus órganos de dirección y con una incipiente transparencia que sigue fomentando la discrecionalidad con sus afluentes de corrupción de la política, principal causa en la transgresión de la democracia en la vida interna de los partidos. Hoy seguimos demandando la democratización plena al interior del partido y porque la cultura democrática se integre en todos los ámbitos de nuestra sociedad a pesar de la brutal agresión que las oligarquías financieras, mediáticas y empresariales consumaron contra nuestra lucha democrática y liberadora en las pasadas elecciones del 2006 y que concretaron el fraude electoral en contra de nuestro candidato a la presidencia: Andrés Manuel López Obrador, el 2 de julio de ese año, lucha que continuamos en el marco del movimiento nacional contra el gobierno espurio de Felipe Calderón con sus políticas represoras, del brutal empobrecimiento, corrupción e injusticia y de nuestro Partido de la Revolución Democrática.

Si el partido no logra solucionar la inmoralidad prevaleciente subsumiendo la ética al quehacer político supone la renuncia a la lucha por la democracia, la liberación y el socialismo. Los corruptos no son nuestros de la izquierda, ahora ni lo serán nunca. La izquierda no tiene nada en común con personajes o partidos que tras años de luchas en la clandestinidad acaban ejerciendo el poder como líderes millonarios, construyendo mansiones, acumulando bienes inmobiliarios, y cuentas bancarias. En la lucha por la liberación y el socialismo, ética y política navegan y constituyen parte de un mismo proyecto: el bien común y el sentido social del quehacer militante de la izquierda.

Ojala y se logre con seriedad y responsabilidad la Refundación del PRD sin la recuperación de los principios y valores que nos dio origen estará lejana la revolución democrática que anhelamos para nuestra patria.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

ELIMINEMOS LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

Hoy 25 de noviembre fue distinguido por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su Resolución 50/134 el 17 de diciembre de 1999, como El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que fue propuesto por la República Dominicana como una forma de recordar y homenajear a las tres Hermanas Mirabal, activistas políticas dominicanas, que fueron brutalmente asesinadas en una fecha como esa de 1960 por orden del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo.

Se trata de organizar actividades dirigidas a sensibilizar al público sobre este problema que lamentablemente persiste y se incrementado mas en países como el nuestro donde la desigualdad y la discriminación constituyen sus causas, agregándose la corrupción y la impunidad en la impartición de la justicia como a sucedido en los feminicidios y la brutal trata de mujeres prevaleciente en México; además de la pobreza de acciones en el marco de la salud sexual y reproductiva que se proyectan como uno de los grandes pendientes en las políticas públicas de los gobernantes y bueno no se diga, finalmente, la embestida de las leyes antiaborto que en el último año se han aprobado en diferentes estados del país con reformas legislativas que “pudieran constituirse en violencia estructural contra los derechos de las mujeres” señalado por Alberto Brunori, representante en México de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, quien además ha criticado que las modificaciones a la legislación interna no han estado en consonancia con los compromisos internacionales adquiridos por el Estado mexicano.

La realidad abominable de que las mujeres de todo el mundo son objeto de violación, la violencia doméstica y otras formas de violencia a menudo están ocultas en su escala y en la verdadera naturaleza de esta cuestión. Una de cada cuatro mujeres ha sido violada en algún momento de su vida en todo el mundo. Dependiendo del país, entre una y tres de cada cuatro mujeres son maltratadas físicamente en sus hogares de forma habitual. Cerca de 120 millones de mujeres han padecido mutilaciones genitales. Las violaciones han devastado mujeres, niñas y familias en los recientes conflictos en Ruanda, Camboya, Liberia, Perú, Somalia, Uganda y la antigua Yugoslavia.

Una de cada tres mujeres iberoamericanas menores de 35 años, lo que equivale a 80 millones de mujeres jóvenes, ha sufrido algún tipo de violencia machista, según cifras de la Organización Iberoamericana de Juventud (OIJ) presentadas en Madrid, en el marco de la I Campaña Iberoamericana contra la Violencia de Género en estos días.. Dentro de los datos proporcionados por esta ONG, se incluye que un 16.5% de las mujeres mexicanas han vivido una ataque sexual, entro otras cifras preocupantes.

En tanto un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe sobre la violencia contra la mujer refiere que cuatro de cada 10 mujeres sufren violencia machista en Latinoamérica y casi el 60% es víctima de maltrato psicológico. Los datos demuestran que la violencia física sufrida por las mujeres va desde golpes simples hasta agresiones severas y que 45% de ellas declara haber recibido amenazas de muerte por parte de sus parejas.

En Perú, según el Ministerio de Desarrollo Social, cuatro de cada 10 mujeres sufren violencia física por parte de su pareja y nueve mujeres son asesinadas al mes por su esposo, pareja o ex compañero.

En Uruguay, entre 2006 y 2007 las denuncias relacionadas con violencia hacia las mujeres aumentaron un 50 por ciento, según un informe del Observatorio Nacional sobre Violencia y Criminalidad en ese país.

En Colombia, una mujer es asesinada por su pareja o ex pareja cada seis días y en Argentina en los primeros 10 meses de 2008 la violencia de género provocó la muerte de 110 mujeres.

De las situaciones de violencia en la pareja declaradas por la juventud chilena, la psicológica es la más recurrente (16.9%) , seguida de la física (7.7%) y finalmente la sexual (0.8%) , según la sexta Encuesta Nacional de Juventud que se presentará el próximo mes de diciembre por el gobierno y que detecto que las situaciones de violencia en la pareja declaradas por la juventud chilena, la psicológica es la más recurrente (16.9%) , seguida de la física (7.7%) y finalmente la sexual (0.8%).

Casi un millón de mujeres en el Reino Unido son víctimas de al menos un incidente de violencia machista al año, según la organización British Crime Survey, informó la BBC.

Cerca del 30 por ciento de las mujeres chinas sufren o han sufrido algún tipo de violencia machista, sea física, psicológica o sexual, estimó hoy la vicepresidenta de la Federación de Mujeres de China, (ACWF, por sus siglas en inglés), Zhen Yan.

En México más del 50% de las mujeres son victimas de alguna forma de violencia. La Encuesta Nacional de Violencia en las Relaciones de Noviazgo, promovida en 2007, reveló que el 15.5 por ciento de la población de entre 15 y 24 años ha sido víctima de violencia física, el 75.8 por ciento ha sufrido agresiones psicológicas y el 16.5 por ciento ha vivido al menos una experiencia de ataque sexual.

En este momento las mujeres mexicanas están viviendo el incremento de agresiones y violencia desde instituciones del Estado. La Secretaría de Salud calcula en casi 150 mil a las mujeres que cada año deben ser atendidas en instituciones públicas por abortos mal practicados, ya son 17 los estados que aprobaron reformas para obligar a las mujeres a una maternidad no deseada. Sin respetar el laicismo del Estado ni tomar en cuenta los argumentos científicos, de salud y seguridad públicas, jurídicos y sociales, legisladores del PAN y PRI, principalmente, han dado satisfacción a sectores ultraconservadores pasando por alto que condenan a la insalubridad, la cárcel o la muerte a las mujeres y familias más vulnerables del país.

Otra expresión del desprecio hacia las mujeres más desprotegidas es la disminución de 27% de los recursos para apoyarlas directamente con dinero público. El análisis correspondiente del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados revela que el Programa de Atención a la Salud Reproductiva y la Igualdad de Género en Salud tendrá un recorte de 82.1%. El Programa de Becas de Apoyo a la Educación Básica de Madres Jóvenes y Jóvenes Embarazadas disminuirá en 4.6% y el del Programa de Estancias Infantiles para Apoyar a Madres Trabajadoras en 7.8%.

No se diga del machismo y la misoginia que prevalece en funcionarios públicos, desde gobernadores hasta jueces y procuradores de justicia que llegan a vociferar declaraciones estúpidas en torno al incremento de homicidios y delitos sexuales hacia las mujeres.

A pesar de que tenemos flamantes instrumentos legales: como La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y las Leyes para la Prevencion y Atención de la Violencia Familiar en México, la realidad es que poco hemos avanzado porque en gran medida la violencia contra la mujer aparte de ser un asunto cultural se ve fortalecida por el poder de la violencia estructural que el estado y sus instituciones persisten en mantener permeados por la simulación en el marco de un poder judicial disfuncional incapaz de hacer prevalecer el ejercicio pleno del derecho.

El ejercicio riguroso de las leyes y reglamentos contra la violencia en cualquiera de sus manifestaciones es el gran pendiente que tenemos para obstaculizar el avance de este problema en México. Bastaría, para empezar a avanzar, con lograr una cobertura universal de los servicios de salud, en particular la atención de la salud reproductiva, de planificación familiar y que se eliminen los obstáculos para que las mujeres tengan acceso a ellos, lograr que las legislaciones estatales en materia de derechos sexuales y reproductivos de las mujeres se homologaran con los estándares internacionales, incluyendo los relacionados con aborto y que integren el reconocimiento de las niñas y mujeres adolescentes y jóvenes, para decidir sobre su sexualidad y reproducción, incluida la decisión de interrumpir o no un embarazo. En tanto rechacemos el uso frívolo de celebrar este día para seguir haciendo acciones cotidianas contra este flagelo, que son las que permiten la construcción de una sociedad capaz de eliminar la violencia contra las mujeres, fomentemos ese arte de amar con el que E. Fromm nos enriqueció para enaltecer nuestras relaciones humanas.

lunes, 16 de noviembre de 2009

PARA CELEBRAR EL BICENTENARIO EN EL 2010:HAGAMOS LA REVOLUCION EN MEXICO

Escribo este artículo a propósito de que en nuestro país celebramos el próximo 20 de noviembre el inicio de nuestra última revolución que por la vía armada logro desde 1910 avanzar hacía la construcción de una sociedad democrática, que luego fue anquilosada por los regimenes priistas hasta llegar a su cohabitación actual con el panismo gobernante, que lejos de lograr su consolidación nos ha retrocedido produciéndonos una sociedad violenta, insegura, con una grave crisis económica, empobrecida e infestada por la corrupción y los antivalores humanos.
Desde hace dos siglos las condiciones de pobreza, injusticia, desigualdad y autoritarismo, que ha vivido nuestro pueblo, producto de los estilos de gobierno despótico de las elites gobernantes, han generado procesos revolucionarios que aspiran no sólo a combatir estos ancestrales problemas sino la construcción de una sociedad plenamente democrática, libre, garante del ejercicio pleno de los derechos sociales y humanos elementales de sus habitantes que permita el anhelado desarrollo integral humano que logre colocarnos como una nación no sólo con expectativas de estar entre las primeras diez economías del mundo por su potencialidades sino en lograr estar entre los diez primeros países con los mas elevados índices del desarrollo humano.
Resulta que en el marco de los futuros festejos del bicentenario de nuestra proclama de independencia como nación y del centenario de este movimiento revolucionario por la democracia que acabo con la dictadura de Porfirio Díaz, cada vez más se han venido sumando voces de inconformidad contra los comportamientos políticos del gobierno federal que dirige un presidente, para nosotros espurio, que lo único que ha hecho es incrementar los problemas económicos, sumiéndonos en más pobreza, desempleo, carestía y ya no tan sólo en la inflación sino a la recesión económica; además de profundizar la desigualdad social sus políticas públicas han incrementado la represión contra los movimientos sociales, el sindicalismo libre, lideres opositores y los programas estratégicos para el desarrollo como el de la educación y salud que se encuentran además de obstaculizados en inversión enmarcados en una gran impunidad con lideres corruptos que conforman cacicazgos que han medrado desde el siglo pasado sin que ninguna autoridad ejercite cuando menos la ley para acabar con sus nefastos comportamientos.
México se debate hoy en el estancamiento y la creciente subordinación económica y política, el atraso y la dependencia tecnológica, el desempleo y la generalización de la informalidad, la creciente pobreza, la carencia de infraestructura y servicios públicos esenciales para el crecimiento y el desarrollo social, la ausencia de Estado de Derecho, la violación de los derechos humanos y sociales, la violencia asfixiante, la corrupción y la impunidad, en medio de una crisis de la credibilidad de los partidos políticos, los órganos legislativos y los gobiernos
Distinguidos intelectuales, académic@s, empresari@s y polític@s hablan de la necesidad de lograr un gran cambio, hablan de que el país ya no resiste, de que hay que lograr su refundación, de la necesidad de que cambiemos el modelo económico y otros hasta de la necesidad de una Revolución moderna (algunos de ellos han tenido el poder político como funcionarios para lograr hacer cambios que trasciendan, pero se perdieron en el marco de sus intereses personales y terminaron alineándose con el estilo de gobierno en turno); el temor que permea es el que el pueblo ya no aguante mas y estalle lo que ellos denominan una crisis social; coinciden en evitar la violencia y los estallidos sociales que vislumbran si la situación no cambia. En el otro extremo se empiezan a manifestar temores de que el próximo año estallen los movimientos guerrilleros que han estado pasivos en las diferentes regiones del país.
La mayoría de los mexican@s tenemos coincidencias en que no debemos dejar que nuestra patria siga siendo desvastada por los comportamientos autoritarios, corruptos, impunes e infames que con cinismo y desvergüenza prevalecen en el quehacer político de los gobernantes y las elites del poder permeando las instituciones pervirtiendo las relaciones sociales y familiares y con ello la disfuncionalidad que nos tiene en la zozobra con sus lacras de violencia, inseguridad, desempleo, pobreza y depauperizacion de nuestro bienestar.
Mostrado esta que el modelo económico que nos han impuesto los gobernantes no ha generado ni bienestar a la población ni desarrollo económico del estado mexicano y que las políticas económicas necesitamos que garanticen el crecimiento sostenido y sustentable de la economía productiva y logren la equidad distributiva, que ofrezca oportunidades de trabajo e ingreso suficiente a tod@s, que promueva al mercado interno y al sector popular, distribuya equitativamente los beneficios, y cuente con finanzas públicas sanas y suficientes para promover el crecimiento económico y sustentar el desarrollo social.
Los demócratas queremos que prevalezca una democracia participativa sustentada en un Estado socialmente responsable, promotor y regulador del desarrollo, donde no tengan cabida la corrupción ni la impunidad; con procesos electorales eficientes justos y transparentes y un sistema democrático de partidos políticos arraigados en la sociedad, que le rindan cuentas y acabemos con los comportamientos antidemocráticos, burocráticos, patrimonialistas y clientelares en los partidos y en el funcionamiento de los poderes del Estado.
Coincidimos que el ejercicio de la justicia no puede seguir dependiendo del grado de empoderamiento político o económico de los demandantes y los consecuentes afluentes de corrupción en sus procesos con sus decisiones Injustas que debilitan el estado de derecho en contra de la mayoría de la población. El sistema ha mostrado signos de podredumbre, desde el Congreso y el Senado donde se integran las leyes, sus integrantes están mas puestos a defender los intereses de sus patrones, sin importarles el daño que provocan al pueblo, sean de izquierda o derecha como ha sucedido en las leyes: fiscal, energética, de PEMEX, electoral, regulatorias de los medios, de presupuestos, etc.…;No se diga de los máximos tribunales y jueces que lo mismo han protegido a gobernantes electos irregularmente, transgrediendo la ley , que exonerado gobernantes asesinos o corruptos además de proteger a pedofilos y traficantes de menores.
Que necesitamos reformar las Instituciones del Estado para que sean eficientes, honestas y transparentes y logremos combatir la corrupción en las instituciones públicas y privadas al exigir y reglamentar la rendición de cuentas, la transparencia de la información y las contralorías y auditorias ciudadanas que acabe con el incumplimiento de la ley, la impunidad de quienes la transgreden y la ineficiencia de los aparatos de persecución del delito y procuración de justicia que son factores sustantivos de la inseguridad y la violencia que hoy amedrentan a todos los mexicanos.
La mayoría de los progresistas decimos que no se puede seguir la injusticia y falta de solidaridad con los trabajadores, se debe lograr una nueva ley federal del trabajo, que reivindique los avances del movimiento sindical sin retrocesos y que logre la renovación democrática de los sindicatos, superando controles autoritarios, corporativos y caciquiles.
Que México debe lograr que todas las etnias y las culturas sean reconocidas por el Estado y la sociedad y se termine con la discriminación, marginación, exclusión y opresión de los herman@s indígenas y de los pobres, apoyemos su lucha ecológicamente sustentable y que intenta acabar con la depredación y explotación irracional de los recursos naturales.
Que tenemos que lograr la igualdad de la mujer en todos los ámbitos de la vida y erradicar el machismo, la violencia sexual e intrafamiliar y se reivindique la libertad de mujeres y hombres de elegir y practicar libremente su sexualidad.
Que los programas sociales no deben seguir siendo instrumentos clientelares, corporativistas y de cooptación política en el marco de las estrategias de todos los partidos gobernantes, utilizar la pobreza de nuestro pueblo para sus fines políticos debe considerarse no sólo como un acto indigno, ignominioso, o transgresión menor electoral, sino criminal. El asistencialismo que ha mostrado ser ineficiente debe ser sustituido por el desarrollo programático integral.
Universitarios y científicos decimos que no podemos seguir funcionando con un sistema educativo incapaz de solucionar el analfabetismo educativo o funcional prevaleciente en la población obstaculizando permanentemente el desarrollo educativo, científico, técnico y humanista fundamental en la construcción no sólo de la democracia sino del desarrollo social sustentable. El Estado debe priorizar la inversión estratégica no sólo para la educación sino también en la ciencia, la cultura y el desarrollo tecnológico.
Que el sistema de salud no puede seguir desarticulado sin capacidad de proporcionar cobertura universal para todos los mexicanos y con sus graves disfunciones ante emergencias epidemiológicas, el modelo mercantilista deshumanizado que prevalece en el ejerció de la medicina además de ser ineficiente y costoso para nuestro pueblos, ha sido incapaz de lograr solucionar no sólo el incremento de las enfermedades crónico degenerativas como la diabetes, la hipertensión, los diferentes tipos de canceres como el que esta matando a gran cantidad de mujeres: sino además los problemas crónicos de desnutrición, Infecciones y sus secuelas de gran mortalidad mas incrementadas en los estados mas pobres del sur del país.
Nuestra generación ha luchado persistentemente, desde la izquierda, por la construcción de una sociedad, igualitaria, incluyente y sin pobreza, donde el Estado socialmente responsable garantice el respeto y ejercicio pleno de los derechos humanos y de las garantías individuales y sociales de tod@s los mexicanos que permita lograr un sistema político plenamente federal de democracia participativa, representativa y republicano de nuestra patria.
El conservadurismo de derecha siempre recurrió a la descalificación de nuestra lucha, nos etiqueto de comunistas y recurrieron a todas las formas de represión y marginación posibles en lo que históricamente es conocido como la guerra sucia con sus métodos mas atroces: asesinatos, secuestros, desapariciones, privación ilegal de la libertad, torturas y procesos jurídicos amañados; muchos compañeros de lucha murieron o fueron desaparecidos, otros lograron ser alienados al servicio del régimen en turno; los que sobrevivimos y continuamos con nuestras convicciones tuvimos que seguir soportando la exclusión y marginación del desarrollo institucional, laboral y económico con sus estelas de acoso permanente atentando la seguridad y el desarrollo economico personal y familiar que no nos ha amedrentado; afortunadamente el desarrollo humano, académico y profesional siempre han dependido mas del acceso a los libros, a los instrumentos de la informática y el ejercicio pleno de los valores que a sus instituciones feudales que dirigen, lo que nos ha permitido mantener la frente en alto y con dignidad seguir luchando.
Por eso es el momento para que todos los que coincidimos hagamos la Revolución necesaria para que nuestra patria logre su independencia y soberanía plena pero sobre todo acabe de una vez por todas con la injusticia, la pobreza, el autoritarismo, la corrupción, los abismos de la desigualdad y toda forma de discriminación prevaleciente. Una Revolución sin violencia que cambie de fondo a los gobernantes y gobernados, una Revolución que debe empezar en tu entorno inmediato en tu familia, la institución, el trabajo, la escuela, la universidad; en fin con tus grupos sociales. La Revolución del 2010 que les propongo será la suma de cambios de quienes amamos con pasión a México para festejar con compromiso y no con frivolidad a nuestra patria; deberán ser cambios donde toda forma de autoritarismo, mentira, simulación, engaño y la corrupción serán contrarrevolucionarios.





martes, 10 de noviembre de 2009

EL AMOR Y LA SALUD MENTAL

Decía Jhon Lennon "nos escondemos para hacer el amor en tanto la violencia la hacemos pública y no nos avergonzamos de sus consecuencias"; pues bien uno de los valores que más ha sido deteriorado en nuestra personalidad y en el campo de las relaciones humanas ha sido este sentimiento fundamental en la raza humana que es el amor.

Siempre es difícil definir las grandes realidades simbólicas y el amor es una de ellas, pero no por ello debemos renunciar a profundizar y reflexionar sobre este valor que a nuestro juicio dignifica y alegra la existencia favoreciendo el respeto, la cordialidad, la bondad y la solidaridad de las personas que hoy son victimas de la deshumanización que nuestras sociedades padecen que se expresan en el mayor de los trastornos psiquiátricos que esta por convertirse como primera causa de enfermedad y de discapacidad en el mundo: la depresión.

Más que un sentimiento el amor es un valor que se integra durante el proceso de desarrollo humano desde el embarazo hasta la última etapa del ciclo vital aunque son determinantes las experiencias infantiles cuya calidad y cantidad definirán el destino que le espera a la persona como lo encuadraría el maestro psicoanalista Santiago Ramírez en su famosa obra: Infancia es destino desde mediados del siglo pasado.

Erich Fromm, también psicoanalista, famoso por su obra el Arte de Amar que constituye uno de los textos básicos de quienes estamos interesados en el estudio de los sentimientos humanos, contribuyo a promover y fomentar este valor del amor, desmitificando, desprejuiciando y logrando clasificar los diferentes tipos de amor que los humanos integramos y debemos expresar en aras de una salud emocional, mental y social adecuada que contribuya al desarrollo integral de nuestra sociedad.

Entre las características fundamentales de todo tipo de amor están:

El cuidado y la preocupación por las necesidades de la persona amada, donde el amor es la preocupación activa por la vida y la realización de la persona que amamos, donde la ayuda desinteresada por el otro se llama amor.

Responsabilidad que significa que el cuidado y la preocupación por la persona amada implica responsabilidad, se esta dispuesto a responder a las necesidades del que amo y su vida me preocupa tanto como la mía.

Respeto que impide que la responsabilidad degenere en dominación y pasividad. Significa la capacidad de ver a una persona tal cual es, respetar significa preocuparse por que la otra persona crezca y se desarrolle como es; de este modo el amor implica ausencia de explotación y de uso de la persona amada.

Conocimiento del otro: No se puede amar aquello que no se conoce, no se puede amar a una persona si se le desconoce; el amor crece y se fortalece en la medida en que el conocimiento de la persona amada aumenta, esto hace posible que cada día más se incremente el amor.

Comprensión, significa entender a la persona amada desde ella misma, no desde nuestra subjetividad interesada, en la medida en que se profundiza en el conocimiento de una persona se toma conciencia de la diferencias respecto a uno que le proporcionan su particularidad como persona.

Por lo anterior amar es Respetar, Adaptarse, Comprender, Perdonar, Aceptar, Comunicarse, Acoger, Dialogar, Ser Solidario, Ser generoso, Ser Leal y Fiel.

Si estuviera presente en todos los actos humanos que realizamos se fertilizaría el comportamiento no violento que hoy nos invade con la inseguridad que nos agobia y la prevaleciente ambición voraz que justifican estupidamente los actos perversos de la corrupción que prevalece en muchos de los comportamientos cotidianos en nuestra sociedad.
Vivimos la violencia y no actuamos para evitarla, como decíamos al inicio hagamos del amor una virtud pública que no nos avergüence sino que nos enorgullezca por haber logrado integrar este valor que ha muchos les hace falta y sin duda es el principio de la felicidad y el bienestar que debemos gozar y al mismo tiempo convertirla en escudo contra algunos de los trastornos psiquiátricos como la depresión y las psicopatías.

lunes, 2 de noviembre de 2009

A PROPÓSITO DE LA MUERTE, LA VIDA Y LOS VALORES

En esta ocasión a propósito de nuestro día nacional mexicano “Día de Muertos”, reflexionemos sobre los valores que cultivamos en nuestras relaciones humanas en los diferentes ámbitos de nuestra existencia, es decir, de nuestra vida, así como en su importancia en el bienestar y la salud mental de las personas y en el logro de esa paz y tranquilidad consigo mismo y con los demás que todos anhelamos tener en el momento de nuestra muerte y que, la mayor parte de los rituales, que sobre la muerte se hacen, de las religiones, coinciden en lograr el que la persona descanse eternamente en paz.

El problema del sentido de la existencia humana y el concepto de bienestar y por lo tanto de la felicidad de las personas está relacionado directamente con la calidad de las relaciones personales que realizamos en los diferentes ámbitos de nuestra vida con la familia, los compañeros de trabajo, familiares, amigos y demás; lo cual depende a su vez de la plenitud de nuestro desarrollo psíquico, emocional, espiritual y social, sin relaciones humanas saludables no existe la salud mental.

Los que nos dedicamos profesionalmente a la atención de la salud mental observamos, como las diferentes psicopatologías en las personas son capaces de alterar la calidad de vida, no sólo del individuo que las padece sino también de su familia, sus relaciones sociales y en el medio laboral en que se desempeña. Los conceptos de salud mental incluyen bienestar, autonomía, competencia, dependencia intergeneracional y reconocimiento de la habilidad de realizarse intelectual y emocionalmente. También ha sido definido como un estado de bienestar por medio del cual los individuos reconocen sus habilidades, son capaces de hacer frente al estrés normal de la vida, trabajar de forma productiva y fructífera y contribuir a sus comunidades en un marco básico de principios y valores humanos. Salud mental se refiere a la posibilidad de acrecentar la competencia de los individuos y comunidades y permitirles alcanzar sus propios objetivos. Con el creciente conocimiento sobre esta interdependencia, surge de manera más evidente que la salud mental es un pilar central en el bienestar general de los individuos, sociedades y naciones.
Desgraciadamente los principios y valores que sustentan la calidad de nuestras relaciones humanas han estado decreciendo en el marco del proceso deshumanizaste del mercantilismo ligado a la globalización neoliberal; la calidad de una relación humana ha sido reducida a la utilidad en el marco del costo-beneficio del comportamiento humano, aniquilando los ideales del ser y el sentido de la existencia, conformando vacíos que lamentablemente inciden en el incremento de los trastornos afectivos y adictivos de nuestras sociedades.

Así, la congruencia, ese ideal de ser como pensamos, es desvalorizada y reducida a simular lo que somos, en aras de no perder los beneficios y prebendas que tenemos. Cuantas veces no nos ha pasado que escuchamos la frase “Candil de la calle, oscuridad de tu casa”, para hacer alusión a esos pregoneros y defensores de valores en la sociedad que no incorporan a su propia vida o la de su familia los valores y principios que promueven y defienden. He tenido la oportunidad de conocer y vivenciar con algunos políticos e intelectuales que públicamente se erigen como férreos defensores de la libertad y la democracia y en su casa, con sus hijos, sus organizaciones políticas o sus ámbitos de control institucional sus comportamientos son autoritarios, intolerantes y despóticos prefigurándose como “dictaduerzuelos” muy alejados de la promoción de la libertad y la democracia.

He observado como destacadas mujeres defensoras de los derechos de la mujer y promotoras de la equidad, se someten a los comportamientos machistas dominantes de sus esposos o parejas y en algunos casos hasta encubren las lesiones físicas, producto de la violencia recibida; y que decir de como tratan a las mujeres que tienen bajo su mando en instituciones donde son tratadas con el mismo abuso y explotación contra el cual públicamente luchan solidariamente y hasta expresan estar dispuestas a ofrendar su vida en su defensa.

Y en cuanto a la amistad y la solidaridad refiero el hecho de que hace 6 años un amigo murió por la falta de apoyo para recibir asistencia médica adecuada, que le permitiera recuperarse de las lesiones de un accidente automovilístico; en vida él era capaz de darse plenamente por todos sus amigos y familiares; en su crisis sus amigos fallamos, los más pudientes y empoderados parecerían querer su muerte, hasta de una posible muerte criminal se sospechó por su más cercano amigo, otros amigos más cercanos con su silencio y pasividad coadyuvaron a que no recibiera la atención médica necesaria, el día de su muerte algunos ni acudieron a su funeral, otros perversamente festejaban su deceso, otros tantos acudían para cumplir con el ritual del funeral. Días después continuaron con la complicidad complementándose a través de homenajes póstumos y una placa que intitula un auditorio con su nombre, además de hacer promesas de que nunca lo olvidarían y que cada año el día de su muerte sería recordado y sus amigos lo venerarían no sólo ese día sino en un altar de muertos que conservarían; hoy como siempre todo ha quedado atrás, sus más amigos progresaron gracias a el por el apoyo que les dio en vida y como beneficio de su muerte, además de ello el grupo político al que pertenecía, mi querido amigo, paradójicamente se vanagloriaba en su documento básico “que nuestro principio central y supremo es servir al pueblo, pregonando con el ejemplo en torno a los valores de la verdad, la honradez, la lealtad, la perseverancia, el servicio, la audacia, la justicia, la solidaridad, la libertad, la democracia, la bondad y el amor”.

Con esto queda ejemplificado que el respeto y la gratitud son valores que frecuentemente olvidamos. En alguna ocasión a un maestro de mi facultad le pude expresar mi gratitud por todo lo que me había enseñado como médico pero que como hombre dejaba mucho que desear por mentiroso, cobarde y abusivo al habernos utilizado de la forma más ruin en su beneficio personal y al ser descubierto recurrió a los comportamientos más represivos y abominable contra nosotros, que juntos combatíamos y habíamos vivenciado de los adversarios políticos, el respeto que merecía se había perdido, obviamente conservo la gratitud por sus enseñanzas que paradójicamente fueron más en el marco de la filosofía humanista de la medicina que en mucho fortaleció mis principios y valores del ser y quehacer no sólo como médico sino además como hombre.

Las funciones que he desempeñado como medico, maestro y directivo de instituciones de educación superior y media superior me han permitido vivenciar la gratitud de los alumnos y pacientes aunque también la ingratitud, algunas son anecdóticas como un directivo actual de una escuela preparatoria del estado, que le pude ayudar a terminar su carrera de medicina, a que lograra titularse como médico a pesar de sus problemas económicos y sociales que tenía, le entregué el titulo de médico y su cédula profesional porque no tenía para hacer los pagos pendientes, dada su situación precaria económicamente en virtud de que tenía la posibilidad de ingresar a una plaza de médico en una institución de seguridad social, a la cual ingresó finalmente; lo volví a encontrar diez años después cuando me necesitaban para lograr el funcionamiento académico y administrativo de esa preparatoria, dado su bajo perfil académico, les ayudé y con el curso de los años se convirtió en directivo, en la que paradójicamente al llegar a ser director, más por los poderes políticos de sus parientes que por sus habilidades académicas, se ensañó con su poder para correrme laboralmente y borrar todo vestigio de mi colaboración en esa escuela y desde luego en su vida.

Mantener la congruencia en aras de la dignidad personal es sin duda uno de los valores más difíciles en todas las relaciones personales, más en el comportamiento político donde casi es inexistente como principio para poder alcanzar el progreso o mantener cuando menos el nivel de beneficios derivados del comportamiento político, la cooptación, la corrupción y la transgresión de los principios y valores humanos son las principales enfermedades de los políticos. No por algo los principales problemas de salud mental que afligen a los políticos tienen que ver con la alta prevalencia de trastornos psicosomáticos (desde las temibles gastritis y colitis hasta la hipertensión arterial), trastornos afectivos, abuso de alcohol y otras adicciones como el tabaquismo y los trastornos de personalidad.

Ciertamente, la incongruencia entre los principios y valores que pregonamos con nuestro comportamiento cotidiano finalmente son perdonados por todos (como parte del ritual), una vez que la muerte nos aborda y estamos siendo sepultados para nuestro descanso eterno en paz, sin embargo tenga usted la certeza que sin duda el primer paso para tener tranquilidad y paz en vida es ser congruentes con lo que pensamos.

lunes, 26 de octubre de 2009

MÉXICO: EL PAIS DE LAS MENTIRAS EN LA POLITICA

En México tenemos un presidente que llego a ese puesto gracias a las mentiras mediáticas en su campaña electorera y que se ufano del “haiga sido como haiga sido”, un dicho popular pueblerino mexicano que se dice al ganar en una apuesta no importando como, y que en el curso de los tres años de su mandato utiliza a las campañas publicitarias y los medios de comunicación para convencer mintiendo (al mejor estilo goebbeliano de los regimenes fascistas) y lo que es peor logra aprobar niveles de aceptación popular entre las clases bajas y medias (donde permea el analfabetismo educativo o funcional con sus incapacidades de utilizar racionalmente el pensamiento, inhibiendo el despertar de las conciencias y como diría Abraham Maslow preocupados cotidianamente en lograr la satisfacción de sus necesidades básicas humanas como la alimentación, lejos del alcance de las motivaciones superiores del ser y de la conciencia).

Quiso convencer a sus electores durante su campaña electoral que traería bienestar y crecimiento económico y a la fecha no sólo ha provocado incrementar la inflación sino el nulo crecimiento económico con sus lacras de carestía y empobrecimiento de mayores segmentos de nuestra población; se autodenominaba el presidente del empleo que no sólo no los ha creado sino se atrevido a desaparecerlos como es el caso del cierre de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro donde estaban laborando mas de 40mil mexicanos; decía que acabaría con la corrupción y no ha realizado ninguna acción trascendente para cunado menos obstaculizar su crecimiento, se autocomplacía diciendo que no importaba la importancia de los involucrados, que acabaría con los abusos del poder como en el caso de algunos gobernadores (Ulises Ruiz en Oaxaca y Mario Marin en Puebla) represores y grandes abusadores de derechos humanos que luego se convertirían en sus aliados; decía que el combate a la delincuencia sería frontal y en el marco del derecho, tuvo que recurrir a las fuerzas militares por su incapacidad de ejercer acciones legales contra los policías y funcionarios infiltrados en los diferentes niveles del gobierno, lucha que nos ha colocado en el nada honroso lugar de uno de los países con mayor numero de homicidios (mas de 13500 en los últimos tres años), mas que los muertos en la guerra de Irak, y secuestros (mas de 23000); prometió también jamás subir impuestos y hoy es ensaña con sus propuestas de incremento del IVA, las tarifas telefónicas y el impuesto sobre la renta sobre los salarios, afectando así a las ya empobrecidas clases bajas y medias que integran la mayoría de nuestro pueblo. En fin son innumerables las mentiras que le han caracterizado en el desempeño de su gobierno espurio que sólo han logrado fortalecer la depreciada imagen de las figuras de autoridad de las instituciones promoviendo la conformación de un estado antisocial caracterizado por los antivalores donde el uso de la mentira, la deshonestidad, la manipulación y el chantaje se convierten en necesarios para lograr el éxito individual o grupal en el marco del ejercicio de las atribuciones y responsabilidades técnicas, profesionales y jurídicas de sus integrantes.

Por eso no sorprende que los otros poderes como el Judicial, mientan y engañen utilizando sus interpretaciones falaces de las leyes socavadas por la corrupción. Según una investigación del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, registrada en la prensa nacional la pasada semana el ejercicio de la justicia en México depende del nivel socioeconómico del ciudadano a mayor pobreza menor justicia y quienes ganan los juicios son los que tienen recursos económicos; además de que en gran porcentaje de las victimas de actos criminales desestiman exigir justicia por la prevaleciente impunidad de los criminales; y bueno ya hemos visto como las decisiones del Tribunal Superior de Justicia Federal (nuestra suprema corte) son siempre en beneficio de los grandes empresarios, altos funcionarios del gobierno y politicos que trafican con sus influencias.
Y que decir del Poder Legislativo representado en el Congreso Federal, cuyos integrantes diputados electos representantes de todos los partidos (PRI, PAN, PRD, PT, PC, PVEM y PANAL), no sólo despersonalizados por su necesaria alineación grupal a los intereses partidistas sino deshumanizados por su perversión clientelar y corporativista para mantener su estatus beneficiario de prebendas, con honrosas excepciones como las mostradas por algunos de los 23 diputados del PT y el PRD que no sólo votan contra leyes nocivas como el incremento de impuestos sino hacen una valiente y magistral defensa de sus posturas justas y libertarias a pesar de la barbarie aplanadora que significan los mas de 400 diputados de los partidos gobernantes derechistas (PAN-PRI-PANAL-PVEM); diputados que finalmente siguen haciendo un culto a la mentira y el engaño en sus pretendidas justificaciones de sus comportamientos políticos que finalmente atienden los intereses de sus liderazgos copulares con el gobernante y los poderes fácticos que les definen su esencia y sus motivaciones hedonistas en su prevaleciente mercantilismo deshumanizante; sus conductas los hacen además convertirse en imbéciles por su pretendido desdén al conocimiento científico, que algunos intelectuales y distinguidos por el premio Nóbel les expresan tratando de convencerlos para la correcta toma de decisiones en los temas trascendentales para nuestra patria (Manejo Energetico, Físcal, Politica Educativa, de Salud, etc..) sin mas motivación que contribuir al desarrollo de nuestra sociedad.

México es en este momento, como escuche decir al maestro filosofo Severo Iglesias “un árbol que se esta secando, sus ramas, sus hojas ya no dan sombra”, nos lo estamos acabando unos por complicidad con estos antivalores otros por omisión en el desarrollo de acciones elementales como el rechazo a la mentira, el engaño y los comportamientos perversos sobre todo de los políticos y los malos gobiernos.
No sólo necesitamos romper el silencio cómplice que prevalece en nuestros entornos, la familia, el barrio, con los compañeros de trabajo, con los maestros, los estudiantes y los colegas médicos, sino rebelarnos permanentemente contra la cultura prevaleciente de la mentira de la cual los beneficiarios han hecho una apología por décadas obstaculizando así el anhelado desarrollo social y humano de nuestro pueblo.

martes, 20 de octubre de 2009

LA MEDICINA QUE NECESITAMOS EN MEXICO

En México tenemos el Derecho Constitucional a la Salud que debería lograrse brindando cobertura total en la atención médica y en el acceso a los tratamientos médicos sin condiciones, sin embargo la realidad es que en los hechos se dificulta hacer efectivo este derecho por los problemas e intereses económicos y políticos que prevalecen en los gobiernos que permean afectando hasta la calidad de la atención médica de la población asegurada en el IMSS y el ISSSTE que enfrentan severas crisis económicas para satisfacer las demandas de los derechohabientes.

Pues bien una y otra vez hemos demandado que para lograr el ejercicio pleno de este derecho fundamental y con ello lograr la modificación del panorama epidemiológico prevaleciente donde coexisten las paradojas de una gran mortalidad por enfermedades crónicas-degenerativas ( Infartos, Diabetes, Cáncer, etc.) con enfermedades derivadas de la pobreza ( Neumonías, Infecciones, Desnutrición, etc..) es necesario que en las políticas públicas sobre la salud prevalezca la medicina social y las estrategias de la medicina preventiva y la salud pública sobre los paradigmas de la medicina curativa que han demostrado su ineficacia, altos costos económicos y sociales, además de la inoperancia en las crisis emergentes epidemiológicas como las virales derivadas de la influenza y la actual provocada por el virus identificado como tipo A-V1H1.
Si reiteradamente se ha señalado que la salud es el estado completo de bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades y que es un derecho fundamental, uno no entendería las resistencias para el cambio si estas no se explicaran en razón de intereses hegemónicos de grupos políticos cuya concepción conservadora del ejercicio profesional en las ciencias de la salud ha creado grupos de poder y elitismos absurdos en defensa de sus intereses patrimoniales obstaculizando el desarrollo institucional y de nuestra sociedad, son los grupos médicos que en el marco de la globalización neoliberal adulan el mercantilismo deshumanizante del modelo de desarrollo económico que nos imponen.
Es absurdo seguir reduciendo el proceso de salud-enfermedad a los aspectos puramente biológicos, esto constituye una perspectiva que parte de una visión fragmentada del ser humano y dirige la reparación de daños hacia la atención curativa más que a la prevención, orienta sus acciones al individualismo y no a las comunidades provocando las sobreespecializaciones y el ejercicio médico mercantilizado en perjuicio de los servicios de atención preventiva.

Hoy como lo venimos haciendo desde hace treinta años retomamos las propuestas por las que hemos venido luchando por la implementación de la medicina social como marco ideológico sustantivo de las políticas del sector salud en nuestro país:

1.-La integración del Sistema Nacional de Salud con la conformación de un modelo que reúna los siguientes elementos:
1.1 Que sea accesible a toda la población de cobertura universal con condiciones de accesibilidad geográfica y económica, suficiencia de recursos físicos, humanos y financieros para todos los mexican@s.
1.2 Que garantice el uso honesto, austero, transparente y eficiente de los recursos en todos los niveles.
1.3 Que logre la reorganización de los servicios del sector salud tomando como referencia el primer nivel de atención y que priorice los servicios médicos preventivos mediante la colaboración interinstitucional efectiva.
1.4 Regionalización operativa del sector salud logrando la anhelada descentralización de los servicios a los estados y municipios para lograr la plena cobertura, optimizar recursos y evitar duplicidades y dispendios.
1.5 Que haga realidad un Modelo de Atención Integral a la Salud capaz de superar los costosos e ineficaces reduccionismos del proceso de atención a la salud.
1.6 Que reconozca e integre con claridad la participación comunitaria superando el clientelismo político prevaleciente, y donde la participación sea realidad en la educación para la salud, la salud mental, la salud sexual, la salud escolar, la salud laboral, la salud nutricional y la salud ambiental.
1.7 Donde se ejerza y respete la función rectora de la Secretaría de Salud en el Sistema Nacional de Salud.

2. Reformar los Modelos Administrativos del Sector Salud verticales, autoritarios y de tutelaje iniciando con la integración de equipos directivos con honestidad, capacidad, responsabilidad, identidad ideológica, de valores, lealtad y sobre todo compromiso con la construcción de una sociedad humanista, libre, democrática y justa.

3. Realizar un Programa Nacional de Formación de Recursos Humanos para la Salud acordes a las necesidades de la población donde se integren las tesis de la medicina social y se termine con el aislamiento de las instituciones de enseñanza de las ciencias de la salud respecto a las necesidades de estos recursos.

4. Fortalecer la inversión y promoción del Estado en la Investigación Científica del proceso salud-enfermedad en sus diferentes niveles bioclínico, epidemiológico y social.

5. Promover y fomentar el ejercicio de la medicina en el contexto general del bienestar y desarrollo humano de manera tal que el enfoque multidisciplinario permita el abordaje integral, se propone desarrollar un proceso gradual de Reforma en la Enseñanza Médica en las instituciones de educación superior para la renovación de los planes de estudio desfasados del contexto actual que vivimos y de los avances cientifico-tecnologicos biomedicos.

6. Debemos superar el modelo curativo de atención a la salud que prevalece, es costoso, no acorde con las necesidades de salud de nuestro pueblo, margina a la medicina preventiva, provoca un ejercicio médico deshumanizado y sobre todo que este esquema de prestación de servicios ha mostrado ser ineficaz y oneroso de acuerdo a estudios de organismos internacionales.

8. Es necesario articular el Programa Nacional de Salud Mental Comunitaria que además de superar la inmoralidad e ilegalidad del estado de atención que reciben los enfermos mentales hospitalizados, permita promover y fomentar los comportamientos saludables, la atención de la enfermedad mental, la violencia social, la violencia familiar y otros problemas de orden psicosocial como las adicciones, alcoholismo, delincuencia, prostitución, etc.

9. Es impostergable la Reforma del IMSS y del ISSSTE que logre acabar con la corrupción, el dispendio y la simulación que las autoridades en turno han promovido y fomentado en detrimento de los servicios para los derechohabientes y los derechos laborales de sus trabajadores.

10. Desarrollar una Cruzada Nacional contra la Corrupción en todos los niveles de las instituciones del sector salud que permita acabar con el dispendio, la desviaciones de recursos, la simulación y el trato inadecuado a los usuarios.

11. Aumentar la inversión del estado mexicano en salud incrementando mínimamente al 10% el gasto nacional en salud como fracción del PIB.

Cada vez que celebramos el día del médico renovemos las aspiraciones por lograr el anhelado cumplimiento cabal del derecho a la salud en nuestro país, derecho que ya no puede ser postergado sino ejercido plenamente.

martes, 13 de octubre de 2009

FELICIDADES A LOS COLEGAS MEDICOS

El próximo 23 de octubre se celebra en nuestro país el día del Médico, obviamente en reconocimiento a la trascendente función social y humanista que representa el ejercicio de la medicina en nuestra sociedad y su contribución al desarrollo integral humano de sus habitantes.
Hace 38 años, el 13 de octubre, iniciamos en el Estado de Nuevo León un movimiento por la reforma académica de la enseñanza de la medicina que fue conocido popularmente como el "movimiento de las Aulas Anexas de Medicina", generado inicialmente por el elitismo en la enseñanza de la medicina en la universidad pública que obstaculizaba sistematicamente el acceso mediante un absurdo examen de selección que sólo permitia el acceso de una minoría que se sujetaba a un diseño curricular ausente de las ciencias sociales, humanistas y con aprendizajes mínimos en la salud pública y la medicina preventiva; los médicos que se formaban se ensoberbiaban en el conocimiento enciclopédico que adquirían y las capacidades míticas curativas que poseían; en tanto al enfrentar la salud con las comunidades la realidad los ubicaba al desecharles este enciclopedismo y exigir las realidades diagnosticas que exigían las enfermedades infecciosas comunes y la desnutrición imperante que prevalecia en esa época.
Lamentablemente nuestro movimiento reformista fue obstaculizado no sólo por el conservadurismo de la derecha que caracteriza a los grupos de poder, incluyendo los médicos, quienes no dejaban de etiquetar nuestro movimiento como "comunista" por nuestra lucha por la medicina social; paradojicamente también la izquierda dogmática y fundamentalista interpretaba nuestro movimiento como instrumento de la burguesía al servicio del sistema, ya que el "reformismo evitaba las necesarias crisis del capitalismo que son la antesala de la revolución socialista".
Pues bien contra toda esta posición, logramos en 16 años de existencia (1971-1987), formar siete generaciones de Médicos con un total de 223 médicos de mas de mil aspirantes que tuvimos, con un programa académico que se gestó como resultado de la necesidad imperiosa de transformar el ejercicio de la medicina y convertirla en un elemento promotor del desarrollo comunitario, donde pensamos que el médico como profesionista debe modificar su formación en beneficio del pueblo, y para ello precisa de un cambio de mentalidad, dicha formación no puede ser solamente en el aspecto curativo, ni tampoco en el social con exclusividad, sino que debe abarcar todos los aspectos haciendo énfasis en la Medicina Social como fundamento primordial para ele ejercicio en cualquiera de sus áreas. Enfatizamos que el elemento humanista forma con el técnico científico una triada insoluble para el ejercicio de la medicina donde los elementos sociales constituyen el cimiento más importante para la formación del futuro México. Elementos que encuentran una estrecha relación con las estructuras psicológicas y socioeconómicas de su vida cotidiana.La formación de estos nuevos profesionistas es algo que compete a la enseñanza de la medicina. Este apartado de la educación incluye: La capacitación científico-técnica constituida por un aspecto informativo acera de los diferentes elementos científicos y metodológicos que puedan ser utilizados como herramientas en su labora cotidiana y le permitan así el ejercicio del segundo aspecto que es el asistencia y de investigación como parte culminante de sus intereses y motivaciones. La Formación de una diferente cosmovisión que incluya un nueva mentalidad médica la cual se integra con la participación personal en la que a través de la capacitación y el servicio se llega a un compromiso mental para consigo mismo y la comunidad, a traves de este proceso llega a identificarse con la población y sus necesidades permitiéndole así la comprensión de sus penurias, sentando así las bases para la planeación de su actividad como médico. Es la mentalidad que se transforma en el proceso mismo de su ejercicio y se hace participe y necesaria para su desarrollo y ejecución. El aspecto formativo es, el resultado de toda su labor en el aula, el laboratorio, la comunidad, los grupos humanos, la familia, los ámbitos de trabajo y educación. Da como resultado una mentalidad con las siguientes características:
Una motivación al servicio.
Una moral social que permita comprender que no es el único en la administración de la medicina y que precisa del trabajo en equipos; que le permita orientarse por los valores colectivos y no por el afán de lucro. Una auto imagen que permita desligarse de los motivos intrapersonales y abandone el afán de gloria como compensación a sus conflictos; que deseche el afán pragmático del éxito, la ciencia no reconoce este valor.
Una clara delimitación de su papel en el sentido de que la salud es un derecho y la medicina no puede administrarse por caridad sino con un profundo conocimiento y comprensión.
Un conocimiento científico-humanista amplio, profundo y actualizado que le permita brindar lo mejor de la cultura y la ciencia y emplearlo adecuadamente en la investigación para provecho de la población misma.
La ira de la barbarie de quienes se oponian a nuestro movimiento logro que nuestra escuela no admitiera mas alumnos y fuera cerrada por presentar estas propuestas que como referimos en el artículo anterior hoy continuan como el absurdo en pleno de Siglo XXI donde los programas de estudio de la mayor parte de las escuelas y facultades de medicina de nuestro país continúen con una estructura curricular donde los diferentes ámbitos del conocimiento filosófico, humanista, social y psíquico sigan siendo marginadas de la formación integral del médico aun cuando los avances científicos sobre el ser humano han probado una y otra vez que el proceso salud-enfermedad está conformado por dinamismos de interacción continua entre los niveles biológicos, psíquicos, afectivos y sociales.
Nuestra formacion como medicos egresados de esta institucion fue posible a la generosidad bondadosa de nuestros maestros que identificados con nuestra lucha se solidarizaban impartiendo sus catedras sin cobrar un sólo peso, con una practica docente rigurosa y puesto que oficialmente los diferentes ambientes clínicos y hospitalarios nos rechazaban, tenian la osadía de integrarnos como practicantes poniendo en riesgo su situacion laboral; desarrollamos ademas un red de medicina comunitaria para la enseñanza, tanto en el medio urbano como rural donde sus habitantes organizados apoyaban para la solucion de los problemas más apremiantes de salud pública.
Finalmente para ser reconcidos y ejercer legalmente la profesión las autoridades condicionaron la no admisón de más alumnos, como si lo que hacíamos fuera una amenaza social, en tanto las presiones familiares y sociales se incrementaban puesto que la primera generacion a la cual yo pertenezco, habíamos terminado los estudios curriculares en 1976 y faltaba el internado de pregrado y luego el servicio social que sólo se hacía en instalaciones del Sector Salud Oficial del gobierno tuvimos que ceder para finalmente terminar y presentar nuestro examen profesional que fue hasta 1981, otorgandonos el titulo y la cedula profesional correspondiente.
Esto no basto para que la ira de la barbarie continuara en el estado, el grupo médico en el poder en la Universidad Autonoma de Nuevo León no permitiría que ingresaramos a cursar estudios de postgrado y cuando por alguna razon lograbamos ingresar eramos expulsados facistamente como los judios en los campos de exterminio. Logramos vencer obstaculos muchos logramos integrarnos laboralmente a las instituciones del sector salud (IMSS, SSA,ISSSTE) y algunos especializarnos y hacer estudios de postgrado a pesar de las circunstancias; felizmente me toco ser un alumno de la primera generacion y ser el último director electo de esta escuela cuyo nombre oficial fue el Instituto de Ciencias de la Salud.
!Felicidades a mis colegas!

miércoles, 7 de octubre de 2009

LUCHAR CONTRA LA DESHUMANIZACION DE LA MEDICINA


El modelo de desarrollo económico, social y político existente en México, conceptualizado como ¨neoliberal¨ ha repercutido en el ejercicio de la medicina de nuestro país, fomentando la práctica de una medicina mercantilista, deshumanizada y materialista, cosificando al ser humano e incrementando las brechas separatistas en la cobertura, calidad y servicio de los diferentes marcos de atención médica existentes en nuestro país: Seguridad Social, Medicina Asistencial (SSA, DIF) y Medicina Privada.
La percepción popular de existir una forma de ejercicio médico para los pobres y otra para los ricos, muriéndose los pobres por no existir capacidad económica para una adecuada atención médica, es una realidad médica que cotidianamente se reproduce en todo nuestro país; lo anterior se expresa en los altos índices de mortalidad existentes en los hospitales públicos de la Seguridad Social y de la Secretaría de Salud que crónicamente padecen las carencias materiales y financieras derivados de las reducciones al gasto social de los gobiernos en turno por las políticas impuestas del Fondo Monetario Internacional, que se contraponen a las suntuosas inversiones que los empresarios de la salud desarrollan con los apoyos oficiales (créditos blandos, facilidades de inversión, apoyos fiscales, etc.) que permiten su mejoramiento en infraestructura de equipo médico-hospitalario con la consecuente mejor preparación para desarrollar la atención médica hospitalaria.

Así, el que tiene recursos económicos suficientes puede mejorar la atención médica y por lo tanto tiene un porcentaje mayor de posibilidades de sobrevivencia en el contexto de su enfermedad. El que no tiene recursos económicos no tiene otra alternativa de atención médica hospitalaria: la seguridad social (IMSS, ISSSTE, etc.) o los hospitales asistenciales de la SSA y el DIF, donde las carencias en los insumos básicos, medicamentos, instrumental, equipos médicos y el burocratismo obstaculizan permanentemente el quehacer del personal médico y paramédico, agregándose como factor negativo más en las posibilidades de recuperación y sobrevivencia de los enfermos.
Lo más lamentable es el impacto que la deshumanización del mercantilismo médico ha producido en el ejercicio médico institucional del sector público disminuyendo los valores éticos y la vocación de servicio, inherente al profesional médico, provocando conductas aberrantes como una menor entrega profesional y escasa disposición a servir con los consecuentes efectos negativos que se convierten en iatrogenia por negligencia profesional que debiera merecer todo el peso de la procuración de justicia.

¿Porqué no han prosperado la certificación obligatoria de tod@s los profesionales de la salud y de los establecimientos dedicados a la atención clínica y hospitalaria?, ¿cuántas cédulas profesionales de médic@s se han retirado como consecuencia de la procuración de justicia a los pacientes y familiares afectados por el mal servicio?, ¿cuántos médic@s, unidades o instituciones han sido objeto de investigación seria, profunda y formal por la posible vinculación a actos de negligencia médica?, ¿cuántas instituciones hospitalarias de nuestro Estado tienen vigentes y operativos comités de vigilancia y supervisión ética de los actos médicos?, ¿cuántas instituciones médicas han dejado de practicar las políticas de control y corrupción ante las denuncias de irregularidades en el ejercicio médico institucional?.

Luchar contra la deshumanización de la medica no sólo requiere comportamientos en el marco de la procuración de justicia y el fomento de la bioética médica, a nivel institucional requiere de un proceso de educación médica continua que desde su inicio, en las aulas de las escuelas y facultades de medicina, logre integrar elementos del conocimiento a nivel informativo que impacten formativamente en los valores humanistas que por excelencia han estado en el desarrollo histórico de la medicina y que le permita al estudiante de medicina sedimentar sus intereses y motivaciones que inicialmente pudieron estar presentes en el afán de querer ser médicos por los satisfactores materiales y económicos que como espejismos le fueran proyectados en el marco de los ideales del ser de nuestra sociedad inmersa en el materialismo y consumismo ejes del mercantilismo social imperante del modelo neoliberal vigente.
Es absurdo que en pleno de Siglo XXI los programas de estudio de la mayor parte de las escuelas y facultades de medicina de nuestro país continúen con una estructura curricular donde los diferentes ámbitos del conocimiento filosófico, humanista, social y psíquico sigan siendo marginadas de la formación integral del médico aun cuando los avances científicos sobre el ser humano han probado una y otra vez que el proceso salud-enfermedad está conformado por dinamismos de interacción continua entre los niveles biológicos, psíquicos, afectivos y sociales.

Ser médico y ejercer la medicina hoy ubicando solo el nivel funcionamiento biológico (físico) del ser humano es el reduccionismo más aberrante que expresa la forma más acabada de deshumanización médica. Formarse como médico sin conocer los ámbitos filosóficos, humanistas, psíquicos y sociales del ser humano es prepararse con paradigmas reduccionistas que inevitablemente fracasaran en el desarrollo del ejercicio profesional médico-humanista.

Las acciones de educación médica deben ser continuas e integradas en el proceso de actualización del médico. Las instituciones tienen la obligación y responsabilidad de promover y fomentar la capacitación médica continua del médico y coadyuvar a evitar que el personal médico permanezca estático, sin evolucionar en el marco de los avances científicos y tecnológicos que día tras día se producen coadyuvando a un mejor conocimiento integral de los dinamismos existentes en la salud y la enfermedad en los diferentes ámbitos biológicos, psicológicos, afectivos, culturales, económicos y sociales.
Así no sólo se trata de integrar modelos conceptuales en el fortalecimiento de ¨prácticas más humanas ¨ en el marco del humanismo o más “calidez” en el marco de la reiterada filosofía de la calidad en el servicio que hoy impregna las políticas del sector salud en nuestro país, en medicina va más allá de la bioética médica, se trata en última instancia de luchar frontalmente contra la brutal deshumanización de la medicina que estamos padeciendo en nuestra sociedad y que poco a poco ha provocado la perdida de la sensibilidad de algunos que lamentablemente lo minimizan cuando en la realidad están inmersos en una transformación perversa donde el humanismo vital del quehacer médico está ausente.

martes, 29 de septiembre de 2009

INTEGRIDAD Y CONGRUENCIA

En los últimos años hemos visto como se han deteriorado gravemente los valores esenciales humanos, hemos sido testigos como ya no sólo son los desprestigiados políticos que mienten, engañan y corrompen, ahora resulta que prevalece en los empresarios y lo que es peor esta gravemente permeando el marco de las relaciones cotidianas en nuestro medio familiar, social y laboral.

Como ya lo hemos referido no se puede explicar la sociedad violenta que vivimos y la correspondiente crisis económica y social sin este grave deterioro que vivimos de los valores humanos en la integración del desarrollo humano de nuestras sociedades. En México vivimos cotidianamente la impunidad no sólo de los delincuentes, los políticos, los empresarios, los medios de comunicación, los comerciantes que en aras de lograr sus exitosas ventas y metas económicas poco les importa ser congruentes con los compromisos éticos que pregonan, sólo les ha servido para cumplir requisitos en las supuestas filosofías de calidad que los embrutece cuando reciben esos reconocimientos. En alguna ocasión tuve la oportunidad de interaccionar con directores de noticieros de los medios televisivos locales y les observaba lo abarrante que resultaba, para la promoción de la salud mental y el desarrollo humano, que en sus barras de noticieros predominaran no sólo las denominadas notas rojas sino la crueldad transgresora además de los derecho humanos de la victimas y sus respuestas fueron contundentes, en el sentido de que ellos los guiaba el mayor numero de audiencia y que no podían dejar este estilo de comunicación sino lo dejaban de hacer todos los medios; de las empresas publicitarias ni hablar su objetivo es vender manipulando a costa de lo que sea, cínicamente se defienden haciendo alusión que su objetivo no es promover la verdad.

Observemos como en los medios de comunicación proyectan la mentira y la manipulación en las campañas publicitarias y estos en sus barras de programación se aprovechan del bajo nivel educativo de nuestra población y el analfabetismo funcional que prevalece, aun en los mas formados “académicamente”, para lograr enganchar incautos que viven fantaseando el éxito mediante el esfuerzo mínimo, sin compromiso social, sin valores y producto de su capacidad de tener cosas materiales que le den el estatus falaz clase mediero o el altanero de las clases privilegiadas incultas de nuestra sociedad. En fin a pesar de los diversos llamados de la UNESCO, la OMS, y demás organismos internacionales y nacionales promotores del desarrollo humano y la salud, sobre la necesidad de modificar las conductas poco éticas y saludables para el bienestar de la sociedad los medios continúan con sus conductas aberrantes en el marco del desarrollo humano.

Los políticos se han ensañado con su prevaleciente inmoralidad, la ausencia de la ética en la política es muy visible, sus incongruencias ideológicas generan perversiones que anestesian los principios y valores humanos más esenciales, padecen de la deshonestidad y la incongruencia, sean de ideologías conservadoras de derecha o progresistas de izquierda, aunque paradójicamente ambos grupos integran en sus filosofías la promoción y fomento de estos valores esenciales en sus propuestas documentales sobre la sociedad por la que luchan. Quienes hemos militado en la izquierda hemos lamentado más como se ha deteriorado el ejercicio de la ética en aras de un pragmatismo ramplón que lo único que ha logrado, además de el enriquecimiento personal y empoderamiento corrupto y perverso, es contribuir a menoscabar el anhelado desarrollo democrático, social y humano de nuestras sociedades con sus lacras de miseria y pobreza que hoy padecemos.

La voracidad y la codicia de políticos, empresarios, comerciantes y delincuentes son la consecuencia lógica de la ausencia de principios y valores éticos en el marco de su comportamiento que más se acentúa cuando el ejercicio de la justicia no prevalece en sociedades como la nuestra. En varias ocasiones he escuchado destacados hombres de empresa y políticos cuyas fortunas han sido producto de estas transgresiones éticas que se enaltecen al referir que todo lo que han hecho ha sido en el marco de las leyes que lo han permitido, no les ha importado el despojo de ejidatarios ni de los bienes de la nación que usufructuaron por medio de la corrupción para enriquecerse y que hoy disfrutan impunemente.

Necesitamos hombres y mujeres íntegros, congruentes y honestos, cuyas conductas se destaquen por enaltecer su dignidad, donde el honor este primero que la lealtad sobretodo a los intereses materiales de grupo o individuales donde las riquezas de sus principios y valores sean los nutrientes esenciales de su bienestar y los necesarios bienes materiales sólo sirvan para enaltecer ese desarrollo humano armónico con los demás y su entorno, donde el individualismo y las lacras de la sociedad de consumo con su mercantilismo atroz dejen de prevalecer como ejercicios perniciosos en los estilos de vida de nuestra sociedad.

No esperemos que los gobernantes y las oligarquías que nos gobiernan integren con seriedad la promoción y el fomento de estos valores esenciales para el desarrollo humano, su “interés” seguirá siendo proyectado en programas y acciones simuladas que les permita en sus discursos alardear de este interés ejercitando una vez más sus incongruencias y sin trascender en serias estrategias educativas o formativas que logren construir una sociedad distinguida por el humanismo prevaleciente en principios y valores. En tanto debemos de promover y fomentar estos valores en el seno de nuestras familias y todos los ámbitos de nuestras relaciones, sociales, laborales, institucionales y políticas para ser congruentes buscando ser íntegros.

martes, 22 de septiembre de 2009

PARA DISMINUIR LA DELINCUENCIA JUVENIL

Mucho se ha avanzado en el conocimiento de las causas en la delincuencia y los comportamientos que violentan la sociedad en el mundo y se ha concluido la participación de múltiples factores, estableciéndose como fundamental que cualquier modelo de prevención y atención debe tener un enfoque multifactorial sino estaría destinado al fracaso. Para decirlo claramente no sólo es un problema que atañe a las instituciones de procuración de justicia y de seguridad pública, desde la perspectiva de acción de las ciencias jurídicas y penales sino además desde los ámbitos de las instituciones educativos y de salud así como de aquellas instituciones como los medios de comunicación que coadyuvan en la formación de comportamientos y hábitos saludables incidiendo directamente en la prevención del delito.

Por otra parte si queremos enfrentar realidades debemos aceptar el fracaso que han representado los modelos de intervención “carcelarios” prevalecientes en las instituciones de readaptación social y los internados para menores infractores, que se han constituido en escuelas para fortalecer el comportamiento delincuente con sus estadísticas prevalecientes de reincidencias en actos infractores de las personas "rehabilitadas" de sus instituciones en el marco del crónico padecimiento de carencias de recursos humanos, materiales y financieros y políticas sexenales que no logran la efectividad, integralidad y continuidad programática necesaria para transformar realidades.

Poco han cambiado los perfiles detectados de los delincuentes juveniles y que no son sino la expresión de está multifactoriedad a la que nos referimos y que la OMS establece como necesario concientizar para lograr efectos reales en la disminución y la prevención de los delitos. Los múltiples estudios de investigación científica que hemos desarrollado sobre delincuencia juvenil nos han permitido establecer los perfiles de los niños, familias y comunidades en riesgo así como las características del adolescente infractor prefigurando oportunidades de intervención primaria para evitar daños mayores en su persona y la sociedad.

Está confirmado como la pobreza, marginación y exclusión de los beneficios del desarrollo social (educación, vivienda, salud, recreación) afecta el desarrollo de los barrios y conlleva a las denominadas zonas rojas de alta delincuencia que en todas las ciudades existen y que en el caso de nuestra área metropolitana de Monterrey están bien detectadas, donde la alta incidencia de violencia familiar, juvenil, conyugal, lesiones, homicidios, suicidios, robos, consumo de drogas son enfrentadas por la autoridad con políticas reiteradas de operativos, redadas e intentos de organización de los jóvenes “pandilleros” en actividades “preventivas” haciéndolos participar en reducidos eventos deportivos, culturales y artísticos para engalanar las políticas de la autoridad en turno, que una y otra vez le servirán para publicitar que si están haciendo prevención del delito en estas zonas, con la paradoja de que en vez de lograr disminuir los comportamientos criminales estos persisten y en algunas de ellas no sólo se incrementan sino continúan como zonas de alta prevalencia criminal.

Afortunadamente ha sido superado el reduccionismo biológico que establecía la hipótesis del origen del comportamiento delincuente en causas estrictamente biológicas derivadas de factores hereditarios o disfuncionales por alteraciones en las hormonas o del sistema nervioso, de tal forma que ha sido concluyente que el comportamiento criminal y el delincuente son producto de múltiples factores biológicos, psicológicos, ecológicos, sociales, culturales y económicos. También ha quedado atrás el determinismo religioso como causa-efecto en la prevalencia del delito, sin desdeñar la importancia que los valores, inherentes al comportamiento religioso, tiene su influencia en el desarrollo moral del ser humano y su correspondiente efecto en los dinamismos reguladores del comportamiento humano en el marco de las normas y las leyes sociales.

Sabemos que la mayor parte de las familias de los adolescentes delincuentes, en nuestro país y estado, proceden de los niveles socioeconómicos bajos y de zonas de pobreza, son de miembros numerosos más de 5 a 7 o reducidas con 1 a 2 hijos, con padres de baja escolaridad de 6 a 9 años cursados, con indicadores de promiscuidad y hacinamiento en su vivienda. Conyugalmente desestructuradas por separación o ausencia física de uno de los padres y en el caso de la existencia de los dos, uno de ellos ausente en sus funciones de apoyo emocional y psicológico hacía el hijo. La dinámica de integración familiar se caracteriza por presentar relaciones conflictivas, trastornos en la comunicación, deficiencias en la capacidad de tomar acuerdos, con graves problemas de equidad, conflictiva principal en la autoridad, dirección e integración de los miembros que sustentan los reiterados diagnósticos de familias disfuncionales con carencias afectivas crónicas donde el amor es sustituido por la agresión constante en las relaciones interpersonales. En suma un ambiente familiar donde los problemas económicos y los satisfactores mínimos de una buena alimentación, salud, educación, recreación se suman a un medio ambiente incapaz de proporcionar los nutrientes psíquicos, emocionales y morales necesarios para el crecimiento y desarrollo normal de la personalidad.

El resultado es una infancia donde prevalecen los trastornos en el desarrollo psicomotor, con rasgos neuróticos infantiles como la enuresis, retrasos en el desarrollo del lenguaje, dificultades en la atención, cursando con problemas en el aprendizaje, en su mayoría con trastornos del rendimiento escolar, trastornos disciplinarios que los lleva a la deserción escolar y posteriormente a su integración laboral temprana generalmente como ayudantes en actividades marginales laborales en la construcción, el comercio o la calle. Un desempeño laboral que generalmente se caracteriza por la presencia de conflictos personales, inestabilidad e inadaptación en el medio de trabajo.

Son adolescentes que tienen como rasgos generales de personalidad y conducta el egocentrismo, la pasividad, la labilidad emocional, tendencias a la inestabilidad, inseguros, con bajo nivel de frustración, con tendencias a la fantasía, dificultad en los procesos intelectuales, rebeldía, dominantes y tendencias disruptivas que revelan las dificultades en el desarrollo de controles, límites y regulaciones necesarios para evitar el comportamiento violento y criminal.

La valoración psicometrica muestra que más de un 60% presenta alteraciones en la coordinación viso motriz, un nivel de desarrollo menor a la edad cronológica, coeficiente inferior al rango medio, desorientación en la realidad, control de impulsos deficientes, estructura normativa débil, nivel de autoestima baja, deficiente capacidad de insight, identidad difusa y débil y una sexualidad desvalorizada con problemas en la identidad. La mayoría es detenido inicialmente como menor infractor por actos contra la salud, siguiéndole el robo, pandillerismo, lesiones, delitos relacionados con la sexualidad y homicidio.

De tal forma que utilizando los sistemas de clasificación diagnostica para trastornos mentales (ICD-10)más del 50% cumple con los criterios establecidos para el diagnóstico de Trastornos Disóciales, el 41% presenta el abuso de substancias psicoactivas mayormente marihuana, cocaína, inhalantes y alcohol, el 32.5% con algún grado de subnormalidad mental y un 16% Trastornos afectivos de personalidad.

Como podemos darnos cuenta las diferentes formas de comportamiento criminal comparten numerosos factores de riesgo subyacentes comunes, algunos consisten en características psíquicas y del comportamiento, como el escaso control de éste, una baja autoestima y trastornos de personalidad y la conducta. Influyen también los problemas psiquiátricos y están ligados al abuso de drogas y alcohol y a experiencias como la falta de lazos emocionales y de apoyo, el contacto temprano con la violencia en el hogar y las historias familiares o personales marcadas por divorcios, separaciones, desintegración funcional y abusos físicos o sexuales. Los factores comunitarios y sociales más importantes destacan además de la pobreza, las disparidades en el ingreso y las desigualdades entre los sexos.

No es sólo con propuestas jurídicas del ámbito penal, como incrementar las penas o reducir la edad penal, ni el fortalecimiento de los derechos humanos en este ámbito, estas son complementarias de las acciones cotidianas en las que se debe actuar simultáneamente en varios niveles y en múltiples sectores de la sociedad para prevenirla. El papel principal del sector salud no debe reducirse a coadyuvar en el tratamiento y rehabilitación de las victimas y se debiera de aprovechar en los avances derivados de las experiencias de prevención que con éxito se han aplicado en los países desarrollados y que como eje central fomenta las acciones comunitarias.

Sólo con políticas que construyan un modelo de atención integral del delito y logren la operatividad de los programas en la cotidianidad de las acciones sobre la prevención y atención del delito en un marco eficiente de coordinación interinstitucional de los diferentes organismos responsables del sector educativo, de salud, de seguridad pública, procuración de justicia y de derechos humanos en los diferentes niveles de gobierno municipal, estatal y federal y sumando el esfuerzo de los medios de comunicación y las organizaciones ciudadanas lograremos avanzar en la disminución importante de la delincuencia juvenil y con ello mejorar el desarrollo de nuestra sociedad.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Violencia y Menores Infractores

Durante mis vacaciones fui conmovido por la triste noticia del asesinato de toda una familia en el Estado de Tabasco donde inicialmente se pensó que habían sido victimas de la delincuencia organizada y después se ha detenido a los asesinos confesos, de los cuales uno es menor de edad de 16 años, vecino y convivente de la familia asesinada, gustoso de jugar con los hijos que luego masacro y el otro un joven de 18 años que apenas terminaba su adolescencia y les brindaba funciones de seguridad en su vivienda y quienes junto con otro complice de 20 años sin antecedentes delincuentiles consumaron este horrendo crimen con tal salvajismo que incluyo torturas, violación sexual y lesiones corporales progresivas hasta causar la muerte de los padres y su dos hijos menores.
Algo tienen en común estos presuntos asesinos, sus antecedentes del desarrollo psicológico están integrados por haber vivido en familias disfuncionales, con ausentes o deficientes figuras parentales, sin autoridad proyectiva, con conflictos permanentes afectivos, sexuales, existenciales, económicos y violentos; fueron niños que cursaron su infancia con las carencias afectivas, deficiente identidad, autoestima baja, sin integrar habilidades y destrezas fundamentales para el manejo emocional, inseguros, con poca tolerancia a la frustración, no fueron adecuadamente socializados y su desarrollo moral estuvo distante de los estándares prevalecientes en nuestra sociedad; si ha esto agregamos el rechazo por las instituciones educativas y laborales donde inicialmente presentaron problemas derivados de sus desviaciones de la conducta, que en vez de ser objeto de atención y canalizados a alguno de los servicios de salud mental u orientación para niños y adolescentes fueron expulsados y con ello excluidos y marginados del desarrollo social y humano al que supuestamente tienen el derecho constitucional en nuestro país.
La realidad es que en nuestra sociedad prevalece el crónico abandono de las instituciones responsables de la atención de los menores que requieren atención en sus desviaciones de la conducta como es el caso de aquellos que padecen trastornos de conductas disruptivas, como es el caso de la conducta antisocial que detectada oportunamente puede detenerse su evolución a comportamientos psicopaticos criminales como estos que lamentablemente conmocionan temporalmente a nuestra sociedad.
En 1985 y durante los siguientes tres años tuve la oportunidad de participar en una investigación psiquiatrica, psicológica y social sobre conducta delincuente en menores de edad en el Estado de Nuevo León, incluyendo a los homicidas prevalecientes durante ese tiempo cuyas conclusiones fueron determinantes para fundamentar políticas publicas de atención a los menores infractores en el marco de la prevención y atención del delito en nuestra sociedad que a la fecha siguen pendientes en las políticas sociales del Estado y que lamentablemente hoy se integran sólo como explicacion del incremento de la criminalidad y la violencia que padecemos.